El derribo del ático ilegal ubicado entre la Rúa do Paseo y la Alameda de Carballiño contó ayer con el visto bueno de la comisión municipal de obras, que ya había ordenado el pasado año la suspensión de cualquier trabajo en el edificio. El propietario dispone de tres meses de plazo para llevar a cabo la demolición, cuyo proyecto supone un gasto de 20.000 euros. El BNG reitera a la alcaldía que este tipo de infraccións sexa tramitada pola Axencia de Protección Urbanística creada por Política Territorial.
Los representantes de los tres grupos en la comisión municipal de obras de Carballiño dieron ayer luz verde al proyecto de demolición del ático en un edificio con fachadas a la calle Rosalía de Castro -uno de los tramos de la Rúa do Paseoy la plaza de la Alameda.
La decisión tomada por los concejales de la Corporación ratifica el acuerdo adoptado por la Junta de gobierno local el 29 de septiembre de 2008, por el que se ordenaba el derribo de la planta en cuestión y la reposición de la legalidad urbanística, teniendo en cuenta que sobrepasa la altura de los inmuebles establecida por el Plan Xeral de Ordenación (PXOM) vigente desde 1998. La comisión fija un plazo máximo de tres meses para que el propietario del edificio ejecute el plan que presentó el 16 de marzo -que supone una inversión aproximada de 20.000 eurosy que acepta la prórroga que había solicitado en diciembre del pasado año por sus características de obra mayor.
Precinto
La Dirección Xeral de Urbanismo de la Xunta había rechazado una modificación propuesta por el Concello carballiñés para la compensación de alturas entre las calles Rosalía de Castro y Alameda -en la primera son de bajo y cuatro plantas y de siete en la segunda, respectiva menteque permitiría la construcción del polémico ático. Sin embargo, tras la orden dictaminada por el Concello hace medio año, los trabajos de edificación en el interior del edificio continuaron y motivaron una queja del grupo municipal del BNG, forzando su precintado.
Precisamente, la comisión de obras autorizó ayer el levantamiento de los precintos con el fin de llevar a cabo la demolición, que precisará de un plan de seguridad específico para la instalación de una grúa telescópica y un sistema de evacuación y depósito de los escombros resultantes.
El portavoz del BNG en la comisión, Bernardo García, señaló que nós apostamos por trasladar a un ente supramunicipal este tipo de casos, como é a Axencia de Protección da Legalidade Urbanística de Galicia, e para iso presentamos unha moción en novembro do pasado ano, que o señor alcalde aínda non levou ó pleno da Corproación. Los nacionalistas sostienen que a incorporación do Concello a esta axencia de Politica Territorial facilitaría a instruc ción de expedientes sancionadores por infraccións urbanísticas, a reposición da legalidade e a anulación de licencias contrarias á normativa.
Bernardo García recuerda que esta demolición tende a evitar efectos colaterais de difícil solución como é o caso do edificio do antigo Hotel Rogelia. Este inmueble está situado en la plaza Irmáns Prieto de la villa y su ático también deberá ser demolido según un auto dictado por el Tribunal Superior de Xustiza, por no ajustarse la construcción al proyecto inicial.
La decisión tomada por los concejales de la Corporación ratifica el acuerdo adoptado por la Junta de gobierno local el 29 de septiembre de 2008, por el que se ordenaba el derribo de la planta en cuestión y la reposición de la legalidad urbanística, teniendo en cuenta que sobrepasa la altura de los inmuebles establecida por el Plan Xeral de Ordenación (PXOM) vigente desde 1998. La comisión fija un plazo máximo de tres meses para que el propietario del edificio ejecute el plan que presentó el 16 de marzo -que supone una inversión aproximada de 20.000 eurosy que acepta la prórroga que había solicitado en diciembre del pasado año por sus características de obra mayor.
Precinto
La Dirección Xeral de Urbanismo de la Xunta había rechazado una modificación propuesta por el Concello carballiñés para la compensación de alturas entre las calles Rosalía de Castro y Alameda -en la primera son de bajo y cuatro plantas y de siete en la segunda, respectiva menteque permitiría la construcción del polémico ático. Sin embargo, tras la orden dictaminada por el Concello hace medio año, los trabajos de edificación en el interior del edificio continuaron y motivaron una queja del grupo municipal del BNG, forzando su precintado.
Precisamente, la comisión de obras autorizó ayer el levantamiento de los precintos con el fin de llevar a cabo la demolición, que precisará de un plan de seguridad específico para la instalación de una grúa telescópica y un sistema de evacuación y depósito de los escombros resultantes.
El portavoz del BNG en la comisión, Bernardo García, señaló que nós apostamos por trasladar a un ente supramunicipal este tipo de casos, como é a Axencia de Protección da Legalidade Urbanística de Galicia, e para iso presentamos unha moción en novembro do pasado ano, que o señor alcalde aínda non levou ó pleno da Corproación. Los nacionalistas sostienen que a incorporación do Concello a esta axencia de Politica Territorial facilitaría a instruc ción de expedientes sancionadores por infraccións urbanísticas, a reposición da legalidade e a anulación de licencias contrarias á normativa.
Bernardo García recuerda que esta demolición tende a evitar efectos colaterais de difícil solución como é o caso do edificio do antigo Hotel Rogelia. Este inmueble está situado en la plaza Irmáns Prieto de la villa y su ático también deberá ser demolido según un auto dictado por el Tribunal Superior de Xustiza, por no ajustarse la construcción al proyecto inicial.
