El Concello de Beariz ha contratado a una experta la catalogación y realización de trabajos de conservación en la Botica de Doade para convertirla en un museo referente de las farmacias gallegas del pasado siglo XX. La Diputación provincial de Ourense acaba de conceder para este fin una subvención por importe de 5.808 euros, que permitirá abordar el trabajo contratado a María Victoria Folgueira Fariña. En total son más de 1.900 objetos y "calculando uns 10 minutos de traballo para cada obxecto, algúns levarán máis tempo, daríanos unhas 317 horas de traballo ou 40 xornadas", apuntan los responsables municipales.
La catalogación e indentificación del material será un trabajo laborioso. Entre otros elementos, hay un botamen (conjunto de botes de farmacia) de cerámica de estilo francés y decoración modernista, una numerosa y elegante colección de frascos y botellas de vidrio, y vasijas para almacenar todo tipo de sustancias medicamentosas que fueron utilizadas secularmente. Aparte, papeles, recetas, facturas, tarros, utensilios para elaborar supositorios y cremas, material de laboratorio, balanzas de precisión, un viejo microscopio y una antigua máquina de escribir cuya actividad quedó paralizada hace más de cincuenta años.
Además, el local se conserva tal y como fue diseñado a principios de siglo, con sus estanterías y anaqueles, zona de lectura, despacho, rebotica y laboratorio, destacando, también todo el conjunto de piezas y tubos para las lámparas de carburo. Cada uno de estos elementos se mostrará en el futuro museo con la información correspondiente a cada uno de ellos.
Previamente, el Concello acometió en 2019 las obras de acondicionamiento del inmueble y del mobiliario, que se mantiene tal y como era hace más de 50 años. Además de restaurar muebles, se instaló alumbrado led y se repararon las humedades. Los trabajos habían sido financiados por la Consellería de Cultura y Turismo, con una inversión de 48.400 euros.
Una cesión familiar para la divulgación
La Botica de Doade fue cedida mediante un convenio al Concello de Beariz por la familia propietaria con el fin de crear un museo en el que se podrá observar la evolución sanitaria y farmacéutica a lo largo del pasado siglo. Las autoridades locales esperan abrir al público una vez que termine la catalogación de la mayor parte de los objetos. "Son 130 albarellos; 418 botellas e frascos reactivos; 389 caixas de medicamentos e outros obxectos diversos que suman 963", según indican. En algunos casos, habrá incluso que restaurar las etiquetas deterioradas, que fue necesario erradicar del inmueble durante la reforma que se ejecutó el año pasado. Su apertura al público dependerá de la evolución de la pandemia del covid-19. En principio, está previsto que sea para grupos de un mínimo de cinco personas tras la reserva previa en el Concello de Beariz y durante los días de feria en Doade, además de los viernes, sábados y domingos.
