Dentro del programa de promoción turística, el Concello de Beariz pone en marcha dos nuevas rutas: la de Arnelas, de alto interés paisajístico, y una segunda para la puesta en valor de las singularidades mineras, que se vienen a sumar a los cuatro trazados ya existentes en el municipio.
La Ruta de las Minas de Estaño y Wolframio de Beariz ha sido investigada y diseñada por el geólogo Eduardo González Clavijo por encargo del Colegio Oficial de Geólogos de Galicia, que la ha incluido en el catálogo de 12 rutas mineras autonómicas. El Concello de Beariz suscribió con la institución un convenio para impulsar este trazado, cuya presentación, así como las restantes de Galicia, estaba prevista en días pasados y que se suspendió tras la declaración de alarma por el coronavirus.
El alcalde de Beariz, Manuel Prado, anunciaba una próxima "andaina" y la edición de folletos para su difusión, además de la señalización y una segunda fase de intervención en el recorrido con la recuperación de los hornos de fundición que se empleaban en los yacimientos, que estuvieron operativos hasta la década de los años 40 del siglo pasado.
El geólogo Eduardo González Clavijo señala que "la vida de Beariz durante el pasado siglo estuvo marcada en gran medida por la minería" y se refiere a esta ruta, que es de nueve kilómetros y medio, como muy cómoda de realizar, y que "partiendo de la localidad de Beariz muestra los restos de la minería del siglo pasado en la zona". En ella se pueden observar bocaminas, escombreras, hornos abandonados y la presencia constante de los diques de cuarzo blanco en los que se pueden distinguir aún casiterita (óxido de estaño) y wolframita (wolframato de hierro y magnesio), minerales de los que se extraían estos elementos.
El Concello también gestiona la declaración de las minas como Bien de Interés Cultural (BIC), en algunas de las cuales se están realizando trabajos de investigación por parte de empresas que tramitan la solicitud de explotación.
prerromana. A finales del siglo XIX y principio del siglo XX volvió a cobrar importancia, según explica Eduardo González. "A esta minería se uniría en las primeras décadas del siglo pasado la del wolframio, ya que estos dos elementos aparecen en los mismos yacimientos minerales", añade. El auge de la minería del wolframio duró en Galicia hasta los años 60 del siglo XX, destacando en las décadas de los 30 y 40 (por ser una época de guerras). Por todo ello, el Ilustre Colegio Oficial de Geólogos de España, a iniciativa de su delegado en Galicia, Pablo Núñez, y con el apoyo de la Xunta de Galicia y Minería Sostible de Galicia, impulsó la creación de las 12 rutas de minería y geología en Galicia, entre las que se encuentra la de Beariz.
