Los ecologistas achacan a una tala la invasión de las urracas

La suciedad producida por los excrementos de las urracas que anidan en el pabellón polideportivo de Maside, que fue motivo de queja por parte del alcalde del municipio, Celso Fernández, es 'normal' para el colectivo ecologista 'Matar por matar non'. Su portavoz, Xulio Fernández recuerda que, 'hace menos de tres años, varias asociaciones denunciamos la tala de árboles en Maside, en las que se refugiaban las urracas, así como la destrucción de sus nidos'.
Añade que el regidor 'dejó que pasaran unos días para que el asunto se 'olvidara' y concluyó la poda radical, con lo cual dichas aves perdieron su refugio habitual y natural'. A los ecologistas les hace gracia que 'el señor Celso Fernández tenga un problema con las urracas porque se refugian en el pabellón y defecan en el suelo'. Consideran, irónicamente, que 'es una tragedia la invasión de la naturaleza en las infraestructuras de hierro y cemento con que estos alcaldes deslumbran a sus paisanos, olvidándose que ellos mismos fueron los causantes'.

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