El partido elegirá nueva junta local para acabar con las divisiones internas tras los malos resultados
Los cuatro concejales del Partido Popular de Carballiño elegidos en los últimos comicios municipales no tienen previsto renunciar a sus cargos. Así lo confirmaba el cabeza de lista, Ricardo Perea, después de la reunión que mantuvo la junta local del partido, durante la que una parte de los asistentes pidieron que no tomasen posesión el próximo sábado y que dejasen los escaños a los restantes integrantes de la lista, a partir del sexto puesto, ya que también consideran responsable del fracaso electoral a la número cinco.
Ricardo Perea declaró que no van a renunciar porque "representamos a las personas que nos han votado", al mismo tiempo que confirmaba la solicitud que ya presentaron ante los responsables provinciales del PP para poner en marcha un proceso para la elección de una nueva junta directiva. El anuncio de esta convocatoria es el resultado de un tenso y largo debate por parte de los populares en la reunión que se extendió desde las 20,30 a las 23,30 horas del pasado martes, si bien, ya han transcurrido cinco años de la presidencia de Argimiro Marnotes, por cuyo motivo también tocaba abordar un nuevo proceso.
Los miembros de la junta que exigen responsabilidades por los malos resultados habían anunciado que dimitirían en caso de que los ediles no renunciasen. Sin embargo, durante la reunión también se acordó que será el nuevo presidente quien decida sobre la permanencia o no del equipo de Perea en el concello.
