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Ochocientas firmas respaldan el cambio del horario escolar en el Calvo Sotelo, en A Uceira

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photo_camera El edificio de A Uceira está ubicado en el polígono industrial de Carballiño.

La asociación A Uceira promovió la campaña para que los niños entren más temprano a clase

La Asociación de Nais e Pais de Alumnos (ANPA) A Uceira ha dado por finalizada la campaña de recogida de firmas de apoyo a la reclamación hecha por el Consello Escolar a la Consellería de Educación para que proceda a realizar un cambio de horarios en el colegio público Calvo Sotelo. Así, desde el pasado mes de septiembre ha recogido en torno a 800 firmas que remitirán a los responsables de Educación, considerando que el horario es incompatible con la conciliación familiar, además de que perjudica en gran medida a los niños cuyos padres trabajan.

Una de las madres, Mónica Crespo, así lo aseguraba. Su hijo se tiene que levantar a las 07,00 horas y permanecer en Bo Día Familia, el servicio municipal de acogida de los escolares, hasta las 10,15 horas, en que entra a clases. "Son tres horas perdidas y cuando llega a clase ya está cansado. No es lo mismo estar todo ese tiempo que una hora y después salir antes del colegio". Las clases acaban a las 17,15 horas, por lo que "al hacer los deberes y asistir a actividades extraescolares, los niños no tienen ningún tiempo libre".

Por ese motivo, los padres piden "un horario como en los otros centros, con entrada entre las 09,00 o las 09,30 horas, para que los niños no tengan que estar tanto tiempo en Bo día familia o en guarderías, que también supone un gasto mayor para las familias", manifestaba el presidente del ANPA A Uceira, Cristian López.

La reivindicación de la jornada única o al menos de un cambio de horario se prolonga desde hace 10 años, y la Administración autonómica siempre que les ha contestado afirma que es inviable porque resultaría muy costoso. El motivo de la entrada a clases tan tarde se debe a que los autobuses realizan la ruta antes en otros colegios del entorno de Carballiño y también al instituto, prestando el servicio al Calvo Sotelo en último lugar.


La mayor parte de los alumnos usan transporte


En el colegio Calvo Sotelo hay en torno a 560 matriculados y aproximadamente 100 no utilizan el transporte, porque asisten a clases en los dos edificios del casco urbano, Campo da Feira y Calvo Sotelo, mientras que la gran mayoría lo usan para desplazarse hasta A Uceira desde las localidades del rural o desde el propio núcleo de Carballiño. Los padres esperaban una solución con el nuevo plan de transporte porque consideran que "es un problema de recursos y Educación tiene constancia de este problema desde hace años", matizaba Cristian López.

Las dificultades a las que se enfrentan una gran parte de las familias por este motivo ha llevado incluso a la otra ANPA, Xornada Digna, a poner en marcha un servicio de concilia.

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