Los pescadores solicitan financiación a la Diputación para estrenar el nuevo canal el próximo año
La sociedad de pescadores de Carballiño aplaza para el próximo año la terminación del proyecto de cría de truchas autóctonas, pendiente de la financiación. El Concello de Carballiño limpió el canal de 163 metros de longitud situado en la finca de A Lavandeira, en donde se encuentra el edificio del futuro museo del papel. Ahora, el PP gestiona ante la Diputación la inclusión de 60.000 euros en los presupuestos de 2018 para acabar de acondicionar las instalaciones, tras el acuerdo alcanzado en una reciente reunión en la que participaron el presidente de la institución provincial, Manuel Baltar; el portavoz del PP en Carballiño, Argimiro Marnotes, y el presidente de los pescadores, Alfonso Carballeda.
La subvención se destinará a la instalación de cámaras de vigilancia, además de la dotación de un cierre y rejillas para la protección de los peces. El canal se surtirá de forma continuada del río Arenteiro para que la alimentación de las truchas sea completamente natural, según explicó Alfonso Carballeda.
A la espera de la financiación, la sociedad se ha visto obligada a devolver al río los más de 70 reproductores de trucha autóctona que había capturado a finales del pasado año para poner el proyecto en marcha en este 2017. Según indicó el presidente de la sociedad, los ejemplares autóctonos no se acostumbran a la cautividad y se estresaban en la piscifactoría, por lo que fue necesario dejarlos en libertad para evitar la mortandad.
El objetivo está en disponer de aproximadamente 400 reproductores en uno o dos años, para alcanzar los 150.000 alevines de trucha autóctona, con la que repoblar posteriormente los ríos Arenteiro y Marañao. En la actualidad, la trucha autóctona sólo se encuentra en la parte alta de ambos ríos, ya que la repoblación anual se hace con la trucha centro-europea, de menor calidad, pero que se cría bien en cautividad.
La sequía afecta al canal de Toscaña
La sequía de este verano también ha obligado a la sociedad de pescadores a posponer la cría de truchas centro-europeas en el que canal que tiene en el área recreativa de Toscaña. Cada año engordan en este canal en torno a 30.000 alevines, que después sueltan en el coto intensivo durante la temporada de pesca. Alfonso Carballeda declaró que "estamos á espera de que chova, pero se non é así, poremos a funcionar o canal na segunda quincena de agosto, aínda que teñamos que utilizar motores para bombear a auga, que normalmente entra polo seu propio peso no canal". No es la primera vez que la bajada del caudal del río Arenteiro obliga a tomar esta medida, aunque este año, según indica Carballeda, la situación es especialmente alarmante, ya que en algunos tramos el nivel ha descendido hasta 40 centímetros.
