La agrupación de voluntarios de Protección Civil de Carballiño, fundada en 1983 y siendo durante años todo un referente de funcionamiento de la provincia y de Galicia, se encuentra en estos momentos en peligro de disolución. El jefe local, Juan Míguez, asegura que su constitución fue por acuerdo plenario y que la agrupación es municipal como muchas otras operativas en Galicia. Sin embargo, el alcalde de Carballiño, Francisco Fumega, matiza que el interventor del concello ha informado que no puede ser municipal por cuyo motivo confirma su apoyo para que continúe pero que lo haga mediante una subvención tal y como se le concede a otras entidades.
El regidor insiste en que con el parque de bomberos, el convenio con la Xunta para la lucha contra la velutina y el grupo municipal de emergencias que se ha incorporado a la plantilla del concello por sentencia judicial, "estamos cubertos, e seguiremos apoiando á agrupación pero vía subvención".
Llegados a este punto, Juan Míguez se refiere a la indiferencia total con que trata el concello a la agrupación y al desánimo existente por este motivo entre los 47 voluntarios existentes en la actualidad, de los que reconoce que ante esta situación son solamente seis o siete los que acuden cuando se requiere su apoyo, porque "traballar sen cobrar xa é duro e por riba sen ningún aliciente, ata o punto que na Festa do Pulpo incluso os deixaron sen comida despois de estar 12 e 14 horas prestando servizo", señala Míguez.
El concello ha pagado hasta ahora el seguro de accidentes y responsabilidad civil, que según Míguez, costaba 2.500 euros anuales por los 47 voluntarios. Sin embargo el cambio a una compañía privada le supone ahora sobre 6.000 euros.
La agrupación celebrará el próximo día 31 su asamblea anual y en ella decidirán un mínimo de condiciones que expondrán a los responsables municipales para seguir funcionando o para desaparecer. Míguez recuerda que la mayor parte del material que está utilizando el grupo municipal de emergencias ha sido cedido por la Xunta a Protección Civil por lo que en caso de disolución será necesario devolverlo a la Administración autonómica, según figura en los convenios suscritos en su día.
Por su parte el grupo de emergencias municipal asegura que es falso que estén "ninguneando" a los voluntarios, asegurando que algunos de ellos pertenecen a la agrupación y que les unen lazos de amistad. "Non somos nin queremos ser parte responsable dos problemas que poda haber", matizan.
El PP defenderá el próximo jueves en el pleno una moción para apoyar y reforzar esta agrupación.
