Punxín rememora con nostalgia aquel 15 de agosto de 1998 cuando todo el pueblo rindió homenaje a uno de sus hijos predilectos, el cantautor Alberto Cortez, nieto de un vecino, emigrante en Argentina.
El 15 de agosto de 1998 fue una fecha muy especial que nunca olvidarán los vecinos de Punxín. Celebraban como cada año la festividad de San Roque y en aquella ocasión recibían a Alberto Cortez, que había sido invitado por el concello tras enterarse el que entonces era alcalde, Vicente González, que el cantautor de fama internacional tenía sus raíces en el municipio. Era un descendiente de emigrantes en Argentina y la casa de su abuelo, Eladio García, todavía perdura, aunque ya pertenece a otra familia.
Todos aquellos que le conocieron aquel día lloran ahora tras su reciente fallecimiento y en la placa que da su nombre a una de las principales calles de la localidad se podían ver dos ramos de flores y un cirio en señal de duelo.
Vicente González, que fue alcalde entre 1987 y 1999, supo que José Alberto García Gallo, cuyo nombre artístico era Alberto Cortez, tenía raíces en Punxín por el entonces gobernador Enrique Teixeiro. Poco tiempo después escuchó al cantautor por la radio y lo llamó por teléfono, "se sintió muy emocionado de que el alcalde del pueblo de su abuelo le llamase para saludarlo", apunta el exregidor.
Meses más tarde, Alberto Cortez estaba en Galicia para actuar en la TVG, presentaba su famosa canción "El abuelo", así que el alcalde fue a reunirse con él y le comunicó que Punxín quería rendirle un homenaje. "Él mismo eligió el día de San Roque y la corporación aprobó por unanimidad la organización del acto y dar su nombre a una calle", añadía Vicente González.
Francisco Gómez, vecino de la localidad, fue el encargado de recoger el día de San Roque a Alberto Contez en el hotel de Ourense en el que se hospedaba. Lo trasladó en su coche hasta Punxín y le acompañaba el periodista Fernando Ónega. Un gran número de personas le recibió calurosamente y el cantautor les correspondió emocionado, "era un hombre con una personalidad tan grande como lo era físicamente", señalaba el exalcalde. Así, descubrió la placa y seguidamente se celebraba un acto mediante el que le dieron la bienvenida José Luis Baltar, el alcalde y Xosé Lois González (O Carrabouxo).
En el campo de San Wintila y bajo una gran carpa tenía lugar a continuación una cena con cientos de vecinos y amigos del cantante, y la sorpresa más agradable fue cuando se subió al escenario de la orquesta que iba a amenizar la verbena y cantó varias canciones, entre ellas "El abuelo", acompañado al piano por Ricardo Miralles, emocionando a todos los presentes.
Los vecinos de Punxín recuerdan todavía hoy, con nostalgia y emoción, aquella actuación y a aquel hombre tan hablador y tan cercano.
Alberto Cortez tenía por entonces 58 años y se estaba recuperando de un derrame cerebral que lo había mantenido fuera de los escenarios hasta ese día de San Roque. Pasado un año, Vicente González y su mujer viajaban a Madrid invitados por el cantautor. "Nos envió el billete de tren y pagó el hotel", señala, mientras mostraba también las tarjetas que les enviaba cada Navidad. La última vez que le vieron fue antes de una actuación en Vigo hace tres años. Ellos enviaron flores por su funeral al igual que lo hizo el Concello de Punxín.
