INSTALACIONES - TERMALISMO

Sanidade da luz verde al nuevo balneario de Caldas de Partovia

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photo_camera Piscina del nuevo balneario Las Caldas de Partovia, en Carballiño.

Los propietarios pretenden tener en funcionamiento las instalaciones antes de la próxima Semana Santa

La Consellería de Sanidade ha dado el visto bueno al nuevo balneario de Las Caldas de Partovia (Carballiño), propiedad de la familia Garriga, que proyecta su apertura antes de las próximas vacaciones de Semana Santa (13, 14, 15 y 16 de abril). La fecha concreta está todavía por determinar, pendiente de la confirmación de la presencia de autoridades en la jornada de inauguración, que pondrá en funcionamiento el establecimiento termal. La gerente del balneario, Noa Gallego, declaraba ayer que todo está a punto para recibir a los usuarios, incluyendo los que se acojan al programa de Termalismo Social de la Diputación provincial, a partir del día de la inauguración oficial.

Aunque inicialmente estaba prevista su apertura en las pasadas Navidades, el acondicionamiento del acceso al establecimiento por parte de la Diputación y, sobre todo, la autorización por parte de Sanidade, la retrasaron hasta ahora.

El nuevo balneario dará un impulso definitivo al termalismo en Carballiño, teniendo en cuenta que cuando funcionaban las viejas instalaciones, y pese a que estaban totalmente obsoletas, atraía a numerosos usuarios por las propiedades terapéuticas de sus aguas, que manan a una temperatura de 37 grados, procedentes fundamentalmente de toda la provincia de Ourense, Pontevedra y A Coruña, y de ciudades concretas como Ferrol. Por ese motivo, la promoción del nuevo balneario incidirá en los lugares de procedencia de los antiguos clientes, además de ampliar su difusión a otras zonas.

Este establecimiento totalmente actualizado y adaptado a la demanda termal aportará una interesante novedad que consiste en un canal de fleboterapia para el tratamiento circulatorio de las extremidades inferiores, único en toda España, según indicó uno de los propietarios, el arquitecto Carlos Garriga. Además, dispone de duchas circulares, chorro, piscina interior y piscina dinámica, vaso de contraste, seis bañeras individuales y una doble y dos salas de masajes y de tratamiento con fangos, entre otras ofertas.

Además, los usuarios disfrutarán del servicio de una cafetería, con los platos habituales de estos establecimientos, pero en una línea muy saludable, teniendo en cuenta que es un complemento del balneario. Dará empleo a nueve personas, entre ellas, un médico, un masajista, un auxiliar de estética, un técnico de hidroterapia y demás personal necesario para el funcionamiento del balneario y de la cafetería.

La oferta se ampliará un poco más adelante con la incorporación de un mayor número de técnicas estéticas, según indicaron los responsables, quienes también se refirieron a que en el futuro se ampliará el proyecto con la dotación de nuevas instalaciones en el exterior, entre otras, señalan piscinas al aire libre y sauna, incluidos en una segunda fase del proyecto.

Las instalaciones termales ocupan 1.000 metros cuadrados de la superficie total de 1.600 en donde se ha construido, tras derribar el viejo edificio. La inversión total ha rondado los tres millones de euros, según indican los propietarios. 

Mejoras en el Gran Balneario y en el Baniño de Arcos

Otras iniciativas relacionados con el termalismo, que se están desarrollando en Carballiño, tienen que ver con la ampliación del Gran Balneario, de acuerdo con un proyecto del arquitecto Gallego Jorreto para la construcción de un restaurante-cafetería y una piscina. Los propietarios del establecimiento tramitan en estos momentos la autorización de la Xunta. Por otra parte, la Diputación también está realizando mejoras en el Bañiño de Arcos, que es un manantial público, con el acondicionamiento de todo su entorno. 

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