El Concello dispone de autorización de la Hidrográfica para limpiar el río desde hace seis meses
El aspecto que presenta el río Arenteiro a su paso por el municipio de Carballiño es prácticamente idéntico al que registraba hace seis meses tras los temporales de lluvia de la primavera pasada, con troncos y ramas secas en el centro del cauce que impiden el flujo normal del agua. Además, en las riberas se encuentran alisos caídos o a punto de caer sobre el sendero turístico que comunica la villa con el núcleo histórico de Pazos, en el municipio de Boborás. Esta situación motivó al Concello carballiñés a solicitar de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil la pertinente autorización para llevar a cabo, con medios propios, el acondicionamiento del entorno fluvial, que fue contestada favorablemente el pasado mes de marzo.
Sin embargo, los trabajos no se ejecutaron, ya que la brigada de operarios contratada a través de un convenio con el Inem para estas labores únicamente pudo dedicarse, por falta de tiempo, al desbroce del paseo que discurre por el margen derecho del río, a la altura del Parque, y del tramo del citado sendero hasta el límite con Boborás, según indicaron fuentes del gobierno municipal. El portavoz del Partido Popular en la Corporación, Argimiro Marnotes, califica esta actitud del Concello como de "negligencia total y absoluta".
El concejal del PP señala, al respecto, que "non é de recibo que se reciba o permiso da Confederación para limpar o río e que non se faga en tempo e forma". Finalmente, el alcalde, Francisco Fumega, comenta que "solicitaremos da Confederación que execute a limpeza, porque agora non temos personal para facelo, independentemente de que sexa unha competencia deste organismo".
