El presidente participará en la cumbre de Japón para conocer proyectos complementarios al vino
El presidente de la Asociación de Colleiteiros Embotelladores do Ribeiro, Brais Iglesias, asistirá al "G20 Young Entrepreneurs´ Alliance", en Fukuoka (Japón), donde jóvenes emprendedores de los países pertenecientes al G20 se reunirán para intercambiar opiniones y para preparar su propuesta. Al no ser España un país miembro del G20, el representante de los "colleiteiros" formará parte de la Delegación de la Union Europea, una delegación formada por cinco empresarios menores de 41 años, de los que tres son españoles (Navarra, Extremadura y Galicia) y dos de Polonia.
Los "colleiteiros" asisten a este encuentro para conocer posibles alternativas de desarrollo para O Ribeiro. Según declaró Brais Iglesias, "nos interesan proyectos de otros países para el medio rural y ver si se pueden trasladar a España, concretamente al Ribeiro. Se trata de plantear nuevos negocios distintos a la explotación de viñedos o elaboración de vino".
Así, en esta edición del G20 "buscaremos contactos y proyectos orientados al desarrollo económico del rural, no solo para el vino, también para otros paralelos al mundo del vino cono la hostelería, enoturismo, senderismo, todo lo que genere oportunidades de negocio adicionales a la bodega o las viñas en zonas vitícolas", añade.
La cumbre se convoca bajo el lema Imagination Economy - For Sustainable Future, es decir, "economía imaginativa para un futuro sostenible", matiza Iglesias.
El encuentro está previsto entre los días 13 y 18 de mayo y el presidente de los "colleiteiros" participará a través de la Asociación de Jóvenes Empresarios de España, contando con el apoyo económico del IGAPE (Instituto Galego de Promoción Económica), que concede una subvención anual a la entidad para sufragar acciones llevadas a cabo fuera del país.
Un camping insertado en la naturaleza
Brais Iglesias ya participó en la misma cumbre hace dos años en Berlín y en 2018, en Buenos Aires. Además de establecer algunos contactos de ámbito comercial, de esos encuentros también surgió un proyecto de enoturismo que se pretende ejecutar en Castrelo de Miño. Se trata de un camping con cabañas en los árboles y en el que predominen actividades relacionadas con la naturaleza y el entorno. La idea fue trasladada a los responsables municipales por una empresa interesada en llevarla a cabo, contando con un terreno municipal para uso hotelero de más de 5.000 metros cuadrados. Brais Iglesias apuntaba que "estamos a la espera de una licitación del terreno para que la empresa presente el proyecto".
