El proyecto contempla nuevas aceras, asfaltado y las canalizaciones
La Junta de Gobierno de Ribadavia aprobó ayer las bases para la adjudicación de la obra de acondicionamiento de la calle Múñoz Calero, que es la principal entrada al casco urbano. En la próxima semana se abrirá el plazo para que opten tres empresas de la localidad requeridas por el Concello, disponiendo de 10 días para hacer sus ofertas, ya con vistas a realizar la selección de la adjudicataria de las obras.
El proyecto parte de un coste de 47.000 euros, financiados en su totalidad con fondos municipales. Los trabajos consistirán en el levantamiento de las plaquetas de las aceras, que se encuentran en muy mal estado, y que se sustituirán por aceras continuas en cemento. También se asfaltará y señalizará la calzada y se instalarán las canalizaciones para las redes de nuevas tecnologías y de electricidad.
Las obras se ejecutarán en ambas aceras, de 500 metros de longitud cada una, y en la calzada, y se prolongarán durante tres meses.
El concejal de Obras, Javier Iglesias Sendín, destacó este proyecto de acondicionamiento de esta calle por ser la que enlaza con la Rúa Ribeiro y ésta con la calle Progreso, en pleno centro de Ribadavia, siendo la principal entrada y salida del casco urbano hacia la autovía Rías Baixas y el Eixo do Ribeiro.
Además, la Junta de Gobierno también daba el visto bueno al pliego de condiciones para adjudicar en régimen de alquiler la cafetería situada en la Alameda, que es de propiedad municipal. En la próxima semana se publicarán en la página web del Concello y los interesados dispondrán de un mes para presentar sus ofertas.
El alquiler parte de un coste inicial de 300 euros y una concesión por seis años, prorrogable otro año más, si no se realizan obras de mejora. Si hay inversión, entonces la concesión podrá ser de ocho años.
