La solución al arsénico en Castrelo supone 2,7 millones

Avelino Pazos y Ethel Vázquez durante la reunión que mantuvieron esta semana.
photo_camera Avelino Pazos y Ethel Vázquez durante la reunión que mantuvieron esta semana.
La inversión casi se duplica respecto a la previsión inicial del proyecto de captación del Miño

El Concello de Castrelo de Miño ya dispone del proyecto técnico relativo a la nueva captación de agua prevista en el Miño para acabar definitivamente con los problemas que genera la contaminación de arsénico en el abastecimiento a Santa María, Noallo de Arriba, Noallo de Abaixo, Traveso, Nogueiredo, O Foxo, O Rial, O Pazo, Cortiñas, Paradela, Barral y San Esteban. 

La inversión de la que será la primera fase de las obras casi duplica el presupuesto que se barajaba inicialmente y que era de 1,5 millones, alcanzando ahora los 2.721.566 euros (IVA incluido), fundamentalmente debido a la subida del coste de los materiales, a que se contempla también la instalación de paneles solares para alimentar de energía la estación de bombeo y, asimismo, debido a la utilización de maquinaria adecuada para taladrar el suelo con vistas a instalar las canalizaciones y sin necesidad de destrozar los pavimentos.

El alcalde, Avelino Pazos, recibía esta semana el proyecto de manos de la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, que destinó a su redacción 60.000 euros y que también se comprometía ante el regidor a asumir una parte importante de la inversión. “A conselleira considera que o arsénico na auga é un problema de saúde pública importante e por iso xa destinou con anterioridade 400.000 euros para unha solución provisional que está permitindo o consumo de auga”, matiza el alcalde.

Avelino Pazos añadía que “expliqueille á conselleira que o Concello, debido a deuda que nos deixaron, non pode financiar e comprometeuse a facer unha aportación, que espero completar coa axuda da Deputación provincial e da Confederación Hidrográfica do Miño-Sil”.

El proyecto está ahora en manos del equipo redactor para realizar unas modificaciones puntuales, con vistas a su posterior exposición pública.

Paralelamente, el Concello, con el objetivo de agilizar al máximo el proceso, ya tramita los informes sectoriales ante la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, Patrimonio y la Axencia Galega de Infraestruturas, al mismo tiempo que ha solicitado asesoramiento técnico a la Diputación provincial para resolver las expropiaciones necesarias de los terrenos afectados por la ubicación de la planta de bombeo.

Empeño en resolver el problema

Avelino Pazos muestra agradecimiento “á conselleira polo compromiso con Castrelo de Miño e entender a necesidade de arranxar o problema do arsénico”, destacando también “o traballo permanente dende que cheguei á alcaldía para arranxar un problema de saúde pública como é o arsénico na auga que leva a sufrir a veciñanza e ninguén ata hoxe  buscara unha solución”. La captación se realizará en la zona de San Esteban, desde donde se bombeará el agua hasta el depósito de Traveso, que es el de mayor capacidad del municipio, cayendo desde allí por su propio peso a los depósitos de las localidades afectadas por el arsénico, que suponen en torno a un tercio de la población de Castrelo de Miño. Se trata de la primera fase, ya que el Concello proyecta otras dos hasta completar el municipio, una segunda para surtir a Prado, Vide y Astariz y una tercera a Macendo, en estos casos no sufren contaminación, pero tienen carencia de agua cuando hay sequía, por lo que hay que llenar los depósitos con cisternas. Avelino Pazos declara que por el momento se está agilizando al máximo la primera fase y que en el futuro se abordarán las otras dos para poner fin definitivamente al arsénico en el suministro y a la falta de agua por la sequía.

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