La Mancomunidad Turística Terras do Avia, que aglutina a los concellos de Carballiño, Ribadavia, Leiro y Boborás, comienza el nuevo año con dos proyectos a desarrollar en los próximos meses. Por un lado, prevé ampliar una medida que adoptó recientemente el Concello de Leiro y que consiste en ocultar los contenedores de residuos con paneles metálicos en los que se exponen fotografías relativas a distintos monumentos, paisajes o eventos destacados. La idea ha tenido tanto éxito entre el vecindario, que la mancomunidad ha decidido ampliarla en este municipio y exportarla a los otros tres, que ocultarán aquellos contenedores que están causando un mayor impacto ambiental y visual. La inversión prevista asciende a 40.000 euros y será financiada por la Consellería de Turismo.
El segundo proyecto tiene que ver con la solicitud de renovación de la subvención del geodestino, que gestiona esta Mancomunidad Turística Terras do Avia. El pasado año había contado con 40.000 euros de ayuda, a los que habían aportado los cuatro concellos 8.000 más. El presidente de la mancomunidad, Francisco José Fernández, afirma que de esta inversión se benefician las dos comarcas al completo, pese a que sólo los cuatro concellos contribuyen económicamente, ya que la promoción en ferias como Fitur, Termalia o Xantar y las rutas por las bodegas y el territorio se desarrollan en todos los municipios, en colaboración con la Ruta do Viño do Ribeiro.
Además, Terras do Avia continuará trabajando en la limpieza y mantenimiento de sus rutas de senderismo: Pozo dos Fumes, Pena Corneira, la que transcurre entre Leiro y Ribadavia, de Carballiño a Pazos de Arenteiro, la de Pazos a Leiro, el sendero de Santa Cristina y una última también en Ribadavia, según apuntó el presidente.
Un presupuesto anual de 150.000 euros
La Mancomunidad Terras do Avia se puso en marcha en torno al año 2003 entre los cuatro concellos que consideran fundamental el impulso turístico. Pese a que está abierta a nuevas incorporaciones, sigue contando con los mismos miembros. El pasado año gestionó un presupuesto de aproximadamente 150.000 euros, contando con aportaciones de la Xunta, Diputación y las contribuciones municipales, que sumaron 40.000 euros. Además de la promoción turística de las comarca de Carballiño y O Ribeiro y de la limpieza y mantenimiento de las rutas, en este último año crearon los parques de calistenia, en los cuatro concellos y ubicados en distintas rutas de senderismo.
