Suceso en Ourense | Tragedia al morir ahogado un joven cubano en Castrelo de Miño

photo_camera Efectivos de Protección Civil de Castrelo de Miño en la zona del suceso. VÍDEO: JOSÉ PAZ
Yoandro Ibarra, de 24 años, había ido de noche a relajarse al embalse con su novia y otra pareja

Un baño refrescante entre amigos acabó en tragedia. Yoandro Ibarra Álvarez, cubano de 24 años y vecino de Ourense, murió ahogado en la madrugada de este domingo en el embalse de Castrelo de Miño ante la presencia de su pareja y dos amigos, que lo perdieron de vista cuando se estaba dando un baño en la zona de los pantalanes. El joven se desplazó junto a su pareja, dos amigos y su perro hasta el embalse después de trabajar en el gastrobar Auriga de Ourense con la intención de relajarse.

La tragedia sucedió en torno a las 02,15 horas del domingo. Gabriel Gómez, trabajador del albergue, estaba durmiendo en el mismo cuando “escuché llamadas de auxilio de un joven que no lograba salir del agua”. “Bajamos enseguida y también lo hicieron las deportistas de la selección española de piragüismo que se alojaban en el albergue”, señala. El joven Yoandro había nadado desde el tercer pantalán situado a partir del club náutico hasta las boyas y cuando regresaba empezó a hundirse. Varias personas se echaron al agua e intentaron rescatarlo sin éxito.

Alertado el 112, se presentaron en el lugar el Grupo de Emergencias Supramunicipal de Ribadavia, bomberos de Carballiño y O Ribeiro, Protección Civil, Guardia Civil y personal sanitario. Con focos y utilizando una pedaleta intentaron encontrar el cuerpo. Sin embargo, se había hundido a una profundidad de 12 metros, según pudo comprobar por la mañana el equipo de buceo de la Guardia Civil que se desplazó desde A Coruña. En aproximadamente media hora, a las 08,30 horas, sacaban al exterior el cadáver.

Miembros del GES de Ribadavia y el propio Gómez, que también participó en la búsqueda inicial, declararon que debido a la oscuridad del río fue imposible localizarlo antes, “a pesar de que estaba muy cerca del pantalán”, explica el trabajador del albergue, quien asegura que “no es una zona peligrosa, pero por algún motivo, posiblemente porque se encontró indispuesto en el agua, comenzó a hundirse”.

PROFUNDIDAD 

El embalse del Miño en Castrelo está siempre muy concurrido, además de deportistas también por bañistas. Existen importantes desniveles debido a que el embalse cubrió los socalcos de las viñas que antiguamente había en la zona, y así se puede pasar de repente de algo más de un metro de profundidad a los 12 metros, en donde se encontró el cuerpo. 

Una lancha en la zona en donde se ahogó el joven.

Una vecina, que conoce muy bien el río, también indicaba que no es una zona peligrosa, por lo que se baraja la posibilidad de que sufriese una indisposición e incluso se apunta a la existencia de algas en el cauce, en las que pudo haber quedado enganchado.

Horas después del trágico suceso, en Castrelo de Miño todavía seguían conmocionados por lo ocurrido. El Concello decidió suspender el campeonato de piragüismo que estaba previsto y también un acto de inauguración del nuevo catamarán destinado a actividades turísticas. “Suspendémolo como señal de respecto polo falecido e pola súa familia”, explicaba el alcalde, Avelino Pazos, que también pasó la noche en vela. El regidor destacaba la rapidez con la que los buzos de la Guardia Civil localizaron y rescataron el cuerpo en apenas media hora. Posteriormente, el forense ordenaba el levantamiento del cadáver al que se le practicará la autopsia.

El número de ahogados en el último año y medio en Galicia es de 49

La cifra de ahogados en Galicia en el último año y medio se sitúa en 49 fallecidos hasta junio; durante el 2021 y hasta el 30 del pasado mes, se contabilizan siete. En el año 2020, los fallecidos por ahogamiento fueron 42. El caso de Castrelo do Miño no es el primero que se produce en Ourense en los últimos años. A pesar de que los números son menores que en otras provincias gallegas, que cuentan con playas peligrosas, las aguas ourensanas poseen su propio historial.

Entre 2015 y 2019, fueron 25 los muertos en espacios acuáticos en la provincia de Ourense. Algunos de estos casos son el del peregrino angoleño que falleció en 2018 en aguas del Miño a su paso por Ourense, en una zona no habilitada para bañistas. En el año 2017 se dio un caso similar en el que un hombre falleció en el embalse de As Conchas, tras decidir refrescarse al anochecer; y en 2019, un sexagenario se ahogó en la parroquia de San Fiz de Baños. Años atrás, en 2007, otro varón fallecía en la playa fluvial de Muíños tras sufrir un corte de digestión.

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