CONCELLO DE OURENSE

El gobierno local da luz verde a la expropiación en As Burgas

photo_camera Solar de Xardín das Burgas, el que tiene una mayor extensión, 2.870 metros cuadrados a expropiar

La aprobación inicial abre un plazo de tres meses para alegaciones, antes del visto bueno definitivo

La junta municipal de gobierno del Concello de Ourense tiene previsto aprobar inicialmente esta mañana el expediente de expropiación de As Burgas, impulsando así el proceso iniciado por el gobierno socialista anterior en 2013, cuando la Corporación municipal, por unanimidad, decidió cambiar la fórmula de obtención del terreno para el desarrollo termal de As Burgas, cambiando la compensación por la expropiación.

La medida no tendrá que ir a pleno, pero sí abrir un plazo de tres meses para la exposición pública y alegaciones de los recurrentes, antes de que pueda ser aprobada definitivamente, lo que supondrá un paso firme para comenzar a esbozar el desarrollo urbanístico de esta área de reparto, que también es Bien de Interés Cultural.

Con todo, la aprobación definitiva puede complicarse si ocurre como en la ocasión anterior, cuando caducó el expediente expropiatorio por las alegaciones presentadas, con miles de folios que, según el equipo de gobierno anterior, fue imposible resolver en tiempo y forma.

El expediente, completado de nuevo, pretende pagar 1,6 millones a los propietarios expropiados, un total de cinco, titulares, entre otras pequeñas fincas, del solar conocido como Xardín das Burgas o de los antiguos Baños de Outeiro. La superficie a expropiar alcanza los 5.162 metros cuadrados, la mayor parte en manos de la sociedad mercantil Xardín das Burgas (2.870 metros cuadrados) y de la familia Santamarina Airas, que poseen 1.542 metros cuadrados.

Con esta aprobación inicial, el gobierno local que dirige el popular Jesús Vázquez Abad da continuidad al modelo socialista, como ya adelantó La Región. El regidor había planteado la posibilidad de buscar otras fórmulas de obtención del terreno, vía compensación, para amarrar una mayor seguridad jurídica, temeroso de que este asunto, muy litigioso, haga perder al Concello años en los tribunales ordinarios. Pero finalmente optó por seguir adelante con la expropiación, dado lo avanzado del proceso y las dificultades de retrotraer todo lo realizado al principio para elaborar un expediente completamente nuevo.

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