El covid persistente es una enfermedad infradiagnosticada en la provincia, ya que son 300 los pacientes a tratamiento en la Unidad multidisciplinar postcovid, pero se calcula que un 10 o 15% de quienes tuvieron el virus sufre long covid, lo que supone entre 8.500 y 12.800 personas en el área sanitaria. Ourense es pionera en España en investigar los síntomas y la rehabilitación del covid persistente con el proyecto Coperia, que se presentó a principios de diciembre y en el que participan ya 120 pacientes.
Carlos Javier Hermida, que tuvo una pulmonía bilateral a causa del covid en octubre de 2020 y estuvo dos años de baja médica, es uno de los enfermos que ayer se hacía las pruebas en la planta séptima del CHUO para participar en este ensayo clínico. “No puedo subir escaleras ni cuestas ni hacer deporte porque me agoto. Perdí vista, tengo diarreas y dolores musculares”, explica este paciente, que está pendiente de que le concedan la incapacidad. “Me han hecho cuatro pruebas: andar seis minutos, hacer sentadillas durante un minuto, meter la mano en agua fría y grabarme la tos y la respiración”, dice.
Antonia Rivera es una de las enfermeras encargadas del proyecto Coperia, en el que participan 56 pacientes para analizar la rehabilitación física y otros 62 para testear la rehabilitación cognitiva. “La física se divide en dos grupos: quienes hacen la rehabilitación tradicional en Piñor, como Carlos, y la rehabilitación online, a través de una plataforma que les indica los ejercicios que deben hacer en casa o en un gimnasio con la ayuda de una fisioterapeuta, también online”, afirma. El objetivo es comparar la efectividad de ambas rehabilitaciones tras ocho semanas. La rehabilitación cognitiva consiste en realizar los juegos y pruebas que propone una aplicación online y comprobar, también tras ocho semanas, si esa terapia fue eficaz.
El proceso de reclutamiento de los pacientes ha sido más lento de lo esperado. “De hecho, todavía nos faltan 15 pacientes diagnosticados de covid persistente para participar en el proyecto”, reconoce el investigador principal de Coperia, Alejandro García Caballero.
MÁS DE 200 SÍNTOMAS
Aunque se han descrito hasta 200 síntomas del covid persistente, los más comunes son fatiga muscular y respiratoria, taquicardias, cansancio y problemas de atención, memoria y concentración, según explica Ana Belén Rodríguez, enfermera coordinadora de actividades de la Unidad multidisciplinar postcovid del área sanitaria que se creó en marzo del año pasado y atiende a 300 pacientes captados desde Atención Primaria u Hospitalización.
“Hay otros síntomas más raros como la caída del pelo, uñas de los pies moradas, hormigueos y diarreas. El perfil tipo son mujeres de entre 40 y 55 años”, indica Rodríguez, que forma parte de esta unidad junto a neumólogos, cardiólogos, neurólogos y endocrinos. “El tratamiento consiste en darles apoyo para saber cómo manejar sus síntomas y mejorar su calidad de vida. Hay gente que precisa oxígeno, inhaladores o rehabilitación. Hacen terapia grupal, en grupos de 15 personas, y les ofrecemos psicoterapia, fisioterapia, talleres de nutrición, risoterapia, musicoterapia o clases de yoga”, señala la coordinadora.
