Estos colegios de Ourense incorporan 22 testimonios sobre prostitución, violencia sexual y drogas
Los riesgos de internet, las drogas, la violencia de género en los menores son algunos de los temas que más preocupan a la Policía Nacional y a la Guardia Civil en Ourense. A modo de prevención, cada año recorren los colegios de la provincia para dar charlas e impartir talleres.
En ocasiones, su labor es meramente informativa, pero también sirve como herramienta para detectar casos de acoso escolar o delitos que se están produciendo. Ejemplo de ello fue un adolescente que el pasado diciembre se apostó el pin de la tarjeta bancaria de su padre en un juego de ordenador. Se lo contó a un amigo suyo que, a su vez, se lo comunicó a las autoridades durante el transcurso de una ponencia en el centro.
Para 2022-2023, están programadas (la cifra varía en proporción al aumento de la demanda) 73 charlas de la Policía Nacional en 29 centros educativos y otras 236 de la Guardia Civil que fueron solicitadas por 59 centros. Sin embargo, desde el Cuerpo Nacional estiman que en total podrían llegar a alcanzar las 400.
Además, contarán con 22 testimonios: seis sobre prostitución, ocho de violencia sexual y otras ocho de exconsumidores de drogas y alcohol.
La previsión para este curso es, por el momento inferior, a las cifras del año pasado. La Policía Nacional impartió 146 charlas que alcanzaron a 4.768 alumnos en la ciudad. Por otra parte, durante el curso de la pandemia solo pudieron llevarse a cabo 70 charlas.
Los temas que abordarán los colegios
Los peligros online acaparan la mayor parte de las charlas que se organizan. Los agentes hacen especial hincapié en las fotografías y vídeos que se comparten, así como en compartir datos personales o bancarios.
Otro de los puntos que tratan son las adicciones, entre ellas, la ludopatía, las drogas o la dependencia hacia las nuevas tecnologías. La violencia, la explotación sexual y la pertenencia a bandas también forman parte del programa del Plan Director.
“Muchas veces el acoso escolar no está vigilado”
Desde la comunidad de padres ven positiva esta prevención al mundo delictivo y coinciden en que temas como las adicciones y los peligros online preocupan especialmente en la adolescencia.
Sin embargo, también apuntan a la necesidad de una mayor vigilancia del acoso escolar: “No está vigilado muchas veces. Algunos profesores no se lo toman en serio o no saben que hacer, principalmente porque falta escucha”, opina Cristina López, una madre con hijos escolarizados. “Hay adolescentes a los que les da vergüenza contárselo a sus padres y en eso la labor para detectarlo del profesorado es fundamental”, añade.
“La adolescencia puede llevar a los jóvenes a no encontrar el camino a la madurez. Malas compañías o su propia búsqueda puede llevarles a consumos excesivos de alcohol y drogas”, dice Pedro Suárez, padre de otro alumno.
En la misma línea, otras madres como Rosa Fernández, apuntan que, aunque es bueno informar a los jóvenes desde las propias aulas, “el día a día es fundamental”.
