Alerta sanitaria

El 90% de los ourensanos no se aleja de casa, a la espera de la desescalada

Un Policía entrega mascarillas a una vecina de la ciudad (JOSÉ PAZ).
photo_camera Un policía entrega mascarillas en la ciudad. (Foto: José Paz)
Las salidas fuera del entorno residencial cayeron a más de la mitad de antes del confinamiento en la mayor parte de la provincia

Camino ya del mes y medio con el estado de alarma decretado, la limitación de la movilidad que se buscaba con las medidas de confinamiento parece estar dando sus frutos en la provincia de Ourense, donde pese a algún que otro repunte de casos  la situación parece estabilizada y permite otear la salida de la crisis, premiando así los sacrificios que la ciudadanía está realizando para controlar la pandemia, que se hacen sentir en el día a día de la provincia. Así lo indica el trabajo publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la movilidad de la población a partir de la posición de los teléfonos móviles y en función de áreas residenciales.

Los resultados permiten concluir que los ourensanos sí se están quedando en casa y cumpliendo con los requerimientos, ya que algo más del 88% de los habitantes de la provincia no se mueve del área de donde vive teniendo en cuenta los datos del pasado lunes 13 de abril, un porcentaje que ha ido cayendo ligeramente desde el inicio del estado de alarma.

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La diferencia es notoria con un día "normal" antes de que el coronavirus pusiese patas arriba todo, ya que atendiendo al estudio del INE lo normal era que más del 27% de los vecinos de la provincia se desplazasen fuera de su área residencial, algo más de 84.300 personas, cifra un 57% más elevada que los 36.500 que lo hacen en las circunstancias actuales.


Diferencias


La fotografía general de la provincia ofrece un resultado positivo, pero existen matices en función de cada territorio, con zonas en las que la caída de los desplazamientos es todavía más evidente. Así, en siete de cada diez concellos la disminución de la movilidad en comparación con la situación previa al coronavirus cayó más de la mitad, con áreas como la que comprenden Lobios, Bande, Lobeira o Entrimo en la que según el INE uno de cada cuatro vecinos (un 24%) salía hacia otras zonas, mientras que ahora solo lo hacen poco más del 3%, lo que supone casi un 87% menos de personas.

También los vecinos de Ribadavia han reducido drásticamente las salidas fuera del término municipal. Si antes prácticamente un 35% de sus vecinos se desplazaban (1.731), ahora lo hacen 354, un 80% menos. En otras villas como O Barco o Verín también es notorio el cambio de paradigma, con poco más de un 4% de sus habitantes saliendo fuera de los concellos cuando antes lo hacían un 19 y un 17%, respectivamente.

Por el contrario, donde más continúan moviéndose los vecinos, aunque nunca con una disminución menor del 40% respecto a una situación normal, es en el área en la que el INE engloba Rairiz de Veiga, Verea, A Bola, Vilar de Santos y Sandiás, con casi el 20% de residentes saliendo de ella; o en Coles y Amoeiro, con cerca del 19%. En el área metropolitana de la ciudad se nota también una movilidad algo más elevada, ligada a razones laborales al ir hacia Ourense o las principales zonas industriales.

En el resto de cabeceras de comarca, la situación oscila entre la situación de Carballiño, Celanova y Xinzo, donde menos del 10% de sus ciudadanos salen de los municipios, o Allariz y Barbadás, en un 12 y un 16%, respectivamente. 


El desplome en la ciudad oscila entre el 47 y el 66%


El trabajo publicado por el INE permite profundizar dentro de la ciudad de Ourense en el comportamiento por los cinco distritos en los que se divide, con la disminución de la movilidad fuera de cada uno de ellos oscilando entre el 47,4% de la zona que abarca el margen derecho del Miño (A Ponte y O Vinteún, entre otros) y el 66,33% del distrito uno, con el norte del Casco Vello, las principales calles del centro o barrios como As Lagoas incluidos.

La media del conjunto del Concello de Ourense refleja que el cambio con el estado de alarma ha supuesto pasar de casi 34.000 vecinos que se alejaban de su área residencial a poco más de 15.700, lo que supone un 15% del total de habitantes, cuando antes se superaba el 32%.

En el distrito uno la variación es la más alta, al haber pasado de moverse casi el 36% de su población a apenas el 11,5%. En el distrito dos (San Francisco o Barrocás) se mueven el 17,9% del total; en el tres (O Couto, Reza, Carballeira) el 16,9%; en el cuatro (Mariñamansa, Seixalbo) el 12,9% y en el cinco el 15,1%. 


El estado de alarma provoca domingos casi “fantasmas"


Si la situación es de por sí muy diferente en cualquier jornada laborable, los domingos se acentúan todavía más las consecuencias del estado de alarma en lo que se refiere a la movilidad de los ourensanos, con una caída a nivel provincial  respecto a los datos del lunes que supera el 17%, con apenas 30.000 personas que se distancias de sus domicilios, menos del 10% del total del padrón.

En concellos como O Barco, los desplazamientos se reducen más de un 72%, con apenas 173 vecinos  de casi 14.000 que salen del término municipal. En Carballiño, la variación se sitúa por encima del 61%. La caída respecto a una jornada laborable está por encima del 50% en zonas de A Baixa Limia, Valdeorras o Viana.


Los casos vuelven a crecer, pero menos que en Galicia


Después del repunte de contagiados por coronavirus registrado el pasado domingo tras el cribado masivo entre los sanitarios del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO) que elevó la cifra de casos activos una treintena hasta los 1.233, la Xunta informaba ayer de que apenas se contabilizaban una decena más, lo que supone un aumento del 0,85% que está por debajo de la evolución al alza mostrada por el conjunto de Galicia, que cuenta con 91 enfermos más que controlar, una subida motivada especialmente por lo sucedido en Vigo, donde se ha roto la buena tendencia de jornadas anteriores.
Así, en lo que concierne a Ourense se espera que los próximos días sigan suponiendo buenas noticias en la lucha contra la enfermedad, dado que ayer la Xunta informaba de que los responsables de la residencia Nuestra Señora de la Esperanza de Ourense daban cuenta de que 29 de los más de 100 usuarios infectados por el virus estaban ya curados, adelgazando por tanto la lista de positivos en los centros de la tercera edad de la provincia, uno de los factores que explican que la incidencia del coronavirus sea muy superior en Ourense a la que presenta el resto de Galicia. Según el balance de los geriátricos, hay ahora 394 afectados entre usuarios y trabajadores.
Por su parte, atendiendo a los casos totales certificados desde el inicio de la pandemia (1.583), supone que hay más de 500 casos por cada 100.000 habitantes, cuando el conjunto de Galicia acaba de superar los 300, según reflejan los datos proporcionados.

Más víctimas
Tras confirmarse el domingo la primera jornada sin víctimas mortales desde el 27 de marzo, las diferentes informaciones de la Xunta confirmaban ayer el fallecimiento de cuatro personas más en la provincia, una de ellas otro usuario de la residencia Nuestra Señora de la Esperanza, el décimonoveno que muere en las instalaciones de estas características más castigadas por el coronavirus. Por otro lado, la gerencia del área sanitaria dio cuenta de que perdían la vida ingresados en el CHUO dos hombres de 75 y 82 años y una mujer de 100, convirtiéndose así esta última en la víctima mortal de más edad con coronavirus de las confirmadas hasta la fecha.
Estas tres defunciones suponen que el balance total de la pandemia se eleva a 94 personas, de las que 70 murieron en hospitales y 24 en residencias de mayores. En toda Galicia se suman 463 fallecidos, tras 13 casos conocidos ayer.

Hospitales
La cifra de hospitalizados en la provincia continúa por encima de 180, aunque hay que reseñar de nuevo una bajada de pacientes en la UCI, cuyos profesionales atienden a 17 personas, la cifra más baja desde el 1 de abril. Mientras, por centros, el CHUO acoge en planta a 143 personas y los comarcales de Valdeorras y Verín a 17 y 7, respectivamente. Hay otro paciente que está siendo controlado en las instalaciones de Cosaga. Ya se han realizado durante la pandemia más de 10.000 pruebas PCR en la provincia de Ourense. Las altas confirmadas por el Sergas apenas crecieron en la jornada de ayer, con apenas una más que sitúa la cifra de pacientes curados en 248. n

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