Los conductores ya disponen dos carriles en la autovía Rías Baixas, en Xinzo, para circular hacia Benavente. El Ministerio de Fomentó abrió al fin este viernes el carril que permanecía cerrado desde el pasado mes de mayo a causa de la colisión de un camión contra tres vigas del puente por el que discurre la vía de alta capacidad sobre la carretera que enlaza Xinzo y Vilar de Barrio.
El impacto del vehículo arrancó parte del hormigón de las tres vigas, provocando una grieta en el firme de la autovía. Los técnicos de Fomento, para garantizar la seguridad de los conductores, cerraron un carril en sentido Benavente (el más afectado por el choque) e instalaron señalización para que los conductores redujeran la velocidad a 80 kilómetros por hora.
Fomento tenía previsto sustituir inicialmente las tres vigas afectadas por otras nuevas pero, al final, y una vez analizada la seguridad del puente, optó por la reparación, que se inició en la última semana del pasado mes de agosto con una partida de 450.000 euros, según explicaron en el Ministerio.
De la rehabilitación se encargó una empresa de Madrid, que comenzó por unir, tensar y tratar todos los hierros con que fueron fabricadas las tres vigas golpeadas. Tras este trabajo, los operarios trataron las vigas con varios productos químicos y resinas, para finalmente cubrirlas con fibra de carbono, un producto muy poco pesado pero que ofrece más resistencia que el acero.
La mejora finalizó a mediados del mes de septiembre y los técnicos comprobaron el pasado viernes la resistencia y seguridad del puente colocando sobre el firme de la autovía dos camiones de gran tonelaje cargados de grava. 'El puente es seguro, igual que cuando se construyó la autovía', afirmaron en el Ministerio de Fomento.
Fomento tenía previsto sustituir inicialmente las tres vigas afectadas por otras nuevas pero, al final, y una vez analizada la seguridad del puente, optó por la reparación, que se inició en la última semana del pasado mes de agosto con una partida de 450.000 euros, según explicaron en el Ministerio.
De la rehabilitación se encargó una empresa de Madrid, que comenzó por unir, tensar y tratar todos los hierros con que fueron fabricadas las tres vigas golpeadas. Tras este trabajo, los operarios trataron las vigas con varios productos químicos y resinas, para finalmente cubrirlas con fibra de carbono, un producto muy poco pesado pero que ofrece más resistencia que el acero.
La mejora finalizó a mediados del mes de septiembre y los técnicos comprobaron el pasado viernes la resistencia y seguridad del puente colocando sobre el firme de la autovía dos camiones de gran tonelaje cargados de grava. 'El puente es seguro, igual que cuando se construyó la autovía', afirmaron en el Ministerio de Fomento.
