Pese a que la Policía Nacional presentó a Elías A.F. como integrante de una banda organizada itinerante especializada en asaltar establecimientos hosteleros, la titular del Penal 2 lo absolvió de cuatro robos denunciados en el verano de 2016, entre el 23 de julio y el 10 de agosto, porque considera que las pruebas aportadas por las acusaciones -las grabaciones de las cámaras de videovigilancia- no permiten identidicar con claridad al inculpado.
La policía sostenía que las imágenes permitía identificar a Elías como una de las personas que entraron en tres de las cafeterías. "El análisis de los fotogramas obtenidos a partir de esas grabaciones no nos permite extraer esa misma consideración de manera plenamente convincente y más allá de toda duda razonable", asegura la jueza, recordando que ninguna de las acusaciones interesó el visionado de las grabaciones por si arrojaban más luz acerca de la identificación.
En las imágenes tomadas en dos de los bares, "ni siquiera es posible percibir el rostro de la persona". En un caso aparece totalmente difuminado y en otro se aprecia a la persona de perfil.
La jueza opta por la absolución por "falta de pruebas" ya que no aparecen huellas dactilares, muestras de ADN o declaraciones de testigos que lo hubieran visto merodear por la zona.
En este procedimiento también figura como imputado Pedro L.A. pero no pudo ser localizado para el juicio por lo que está en busca y captura.
