Un vecino de la ciudad, de 43 años, fue detenido por la Policía Local como presunto autor de un delito de desobediencia y resistencia. Los agentes procedieron a su detención después de ser alertados al estar increpando a los clientes de una entidad financiera, situada en la calle Juan XXIII.
Los hechos ocurrieron en la mañana del pasado día 8 y el investigado, ante la presencia de la patrulla policial, optó por abandonar la zona. Pero no se fue muy lejos. A los pocos minutos, los agentes volvían ser alertados desde otro banco de que un varón estaba increpando a los clientes y no permitía la entrada a los a trabajadores. Los agentes fueron en su búsqueda y el más tarde detenido también depuso de su actitud.
La situación cambió minutos después cuando un hostelero avisó de que un hombre estaba insultado a sus clientes. El detenido se puso agresivo y amenazó a los agentes.