Una sobrecarga eléctrica, probable causa del fuego mortal en Covadonga

Ni Valentina ni Edilma, las víctimas mortales del incendio declarado en su piso de Covadonga poco antes de las siete de la mañana del pasado sábado, eran fumadoras. Los vecinos y los allegados a estas mujeres, una dominicana de 71 años y una brasileña de 50, también las definieron como extremadamente cuidadosas. Nadie se explicaba qué pudo pasar en la vivienda que terminó siendo pasto de las llamas. Sin embargo, un accidente doméstico es la hipótesis más probable de lo que pudo suceder en el 3ºG del número 3 de la rúa Manuel Lago cuando aún era de noche, todos dormían y, un repartidor de La Región vislumbró las llamas y alertó a los vecinos y a los servicios de emergencia. Más tarde se confirmaría la tragedia, ya que las ocupantes de la vivienda no lograron salir con vida del fuego. La Policía Judicial lidera ahora la investigación para esclarecer las causas del suceso: los expertos confirmaron la misma mañana de la tragedia que no había fugas de gas en el edificio ni se registraron explosiones. El edificio tampoco presentaba daños estructurales. El comisario jefe de la Policía Nacional en Ourense, Juan Carlos Blázquez Hernández, confirmó ayer a este periódico que, aunque aún no hay una causa cierta, “todo apunta a que se puede tratar de algún tipo de accidente doméstico, no contemplamos ninguna otra hipótesis”. Un cortocircuito “Pudo ser algún cortocircuito. Sobre todo en invierno, suelen ser fuentes de alimentación como la típica regleta para varios consumos y se produce una sobrecarga, que acaba por incendiar el cable por calor”, añade el comisario. Será la Policía Judicial, una vez investigue todos los indicios, la que esclarezca qué pudo pasarles a Valentina y a Edilma, que no pudieron sobrevivir al incendio de su casa. Los vecinos, que ayer aún estaban consternados por lo sucedido -en la capilla que hay en el bajo del edificio celebraron una misa en honor a Valentina y Edilma, a pesar de que no profesaban la religión católica- reiteraron ayer el modus operandi habitual del bloque para no pasar frío en invierno. “La calefacción nos cuesta un euro la hora. Llevamos tiempo quejándonos. ¿Cómo puede ser que un piso de protección oficial tenga esos precios para la calefacción?”, se preguntaban ayer varios vecinos del bloque. En este sentido, algunos confirmaron que prácticamente ninguno encendía el sistema por la alta factura que les suponía a final de mes. Calefactores, mantas eléctricas y otro tipo de aparatos son usados, de manera generalizada, por los residentes en este bloque. Los vecinos confirmaban que Valentina tampoco ponía la calefacción y para este invierno se habría comprado un aparato para calentarse, igual que el resto de moradores del inmueble. Aunque la investigación aún no ha dado con un objeto concreto o fuente originaria del incendio, la hipótesis del accidente doméstico se acercaría al uso de este tipo de fuentes de calor. Además, desde del operativo apuntaron desde un primer momento que el principal foco pudo producirse en uno de los dormitorios.