El acuerdo de gobierno entre PP y DO explota a raíz del regreso de Cabezas

Los ya exsocios se enzarzan y hacen propia la idea de la ruptura, que afectará tanto al Concello como a la Diputación

Ayer, 72 horas después de que Manuel Cabezas se convirtiese en el presidente del PP de la ciudad y solo 48 horas después de que cuestionase al alcalde Gonzalo Pérez Jácome en una entrevista en este diario, se consumó el divorcio entre los socios de gobierno. Así, el acuerdo entre PP y DO volvió a saltar por los aires dos años después: si en 2020 se debió a los procesos judiciales que debía afrontar Jácome, la ruptura de ayer vino precedida por el regreso de Manuel Cabezas a la primera línea municipal y su decisión de no compartir travesía con el actual regidor. La separación comenzó a fraguarse a primera hora de la mañana de ayer tras una reunión fallida entre el alcalde  y los ediles populares Jorge Pumar y Flora Moure. Los citados argumentaron que no podían asistir al encuentro, el primero por motivos familiares y la segunda por “una cita laboral inaplazable”. Fue la viceportavoz del PP en la ciudad, Ana Morenza, la que acudió. El alcalde decidió no recibir a Morenza al no considerarla una “interlocutora válida” y convocó una rueda de prensa urgente para las 12,45 horas.

Una vez allí, Jácome confirmó lo esperado: “El PP deja de cogobernar esta ciudad, no puedo tolerar esta tomadura de pelo”, dijo. Así, anunció que retiraba sus competencias a los siete concejales populares, los cesaba de la junta de gobierno local y rescindía sus dedicaciones exclusivas, quedando solo los cuatro ediles de DO como grupo de gobierno. Además, señaló que la ruptura también afectará a la Diputación, donde ya no habrá sintonía de voto entre PP y DO.

A primera hora de la tarde, los populares enviaron un comunicado en el que identifican el “motivo de la salida” con la llegada de Manuel Cabezas. Sostienen que “apoyados por el liderazgo de Cabezas, esta salida es una nueva etapa, un ciclo en positivo”. También explican que Morenza llevaba un recado a Jácome en la reunión que no llegó a celebrarse: debía trasladarle al regidor que Cabezas había decidido abrir un “periodo de reflexión” sobre “la idoneidad o no de sostener un gobierno de coalición en el grupo municipal”. Es decir, Cabezas ya había sentenciado la coalición con DO. El PP considera “injustificable” la actitud de “constantes faltas de respeto” protagonizadas por Jácome. Así las cosas, prometen poner “toda su energía en elaborar un proyecto de ciudad que encare el futuro del progreso que Ourense merece y que hoy tristemente no tiene”.

"Hasta aquí hemos llegado"

El PP regresó al gobierno de la ciudad en julio de 2021, tras haberlo abandonado en septiembre de 2020. “Hasta aquí hemos llegado”, dijo ayer Jácome. Para el regidor, la ausencia de Pumar y Moure no tiene justificación posible, calificando de “plantón ” lo sucedido horas antes de su rueda de prensa. Ayer a mediodía ya había firmado el decreto por el que retiraba las competencias delegadas, que se repartirán entre los cuatro ediles de DO. Jácome aseguró sentirse “liberado”, dijo que “nunca he traicionado a nadie”, que él es “siempre al que traicionan” y que estaba dispuesto a mantener el compromiso hasta el final “por lealtad”: “Aquí estamos gobernando una ciudad, algo serio”. Aseguró haber sospechado de las intenciones de los populares por “movimientos internos” y por una “agilización de facturas para pagar a proveedores compis. Tendrían miedo de que no se les pagase o de que se les retrasasen los pagos si ellos se marchaban”. 

El alcalde recordó que los populares “ya me traicionaron en 2020, confabulados con los tránsfugas” de DO. Aseguró que el “100%  de los retrasos en termalismo son culpa de Flora Moure” y cargó contra Ogando y Pumar. Sobre Cabezas, celebró su candidatura a la alcaldía, llamándole “rémora” y acusándole de “enchufar a cientos de personas en el Concello”.

Una proveedora reclamaba 6.000 euros al Concello y fue expulsada

Minutos antes de la rueda de prensa convocada por Jácome, una proveedora del Concello irrumpió en el salón de plenos reclamando una deuda con su negocio de 6.000 euros. La mujer en cuestión, América Soto, una veterana comerciante del barrio de A Ponte, exige al Concello esa cantidad por el alquiler de los trajes de los Reyes Magos utilizados en la cabalgata de este año. A este respecto, Jácome indicó que la empresa de Soto tiene “deudas con la Seguridad Social” y, por lo tanto, “no hay luz verde” para efectuar el pago.

Soto, después del salón de plenos, entró en el despacho de alcaldía, del que fue desalojada por la Policía Local y el concejal de Seguridad Ciudadana, Telmo Ucha, al que le gritaba que no le tocase. “No me toques”, resonaba por todo el edificio.

Te puede interesar