El Juzgado de Instrucción número 3 de Ourense condenó a diez meses de prisión a Adrián S. M. por un delito de robo con fuerza.
No fue la primera vez que este inculpado se sentó en un banquillo. En 2009 fue condenado a seis meses de prisión por provocar lesiones en tres peleas y, actualmente, él y su mujer, D.V.L., están a la espera de un juicio por homicidio imprudente en relación a la muerte de su bebé de dos meses y las lesiones provocadas a su hermano gemelo.
La fiscalía les pide siete años de prisión, tres por el homicidio imprudente y cuatro por las lesiones a su hermano. Al parecer el padre "asió y presionó fuertemente por los costados" a uno de los bebés provocándole fracturas costales y la madre no trató de evitarlo. Tres días más tarde la pareja acostó al otro bebé en un maxi-cosi orientado hacia un calefactor de aire caliente que causó la muerte al niño, probablemente por deshidratación.
Siete meses más tarde, Adrián Soto Mangana era detenido por robo con fuerza en la mercería Puntada e Fío, ubicada en la calle Río Bibei. El acusado acudió al establecimiento fuera del horario de apertura y tras fracturar el entrepaño inferior de la puerta, accedió al local y se apropió de un lector de DNI, forzó la caja registradora hasta que quedó inutilizable y se apropió de 450 euros. Los daños causados ascendieron a 551,30 euros.
Pese a que en un principio la fiscal pedía para el imputado tres años de prisión, durante el transcurso del robo, Adrián Soto Magna estaba bajo los efectos de las drogas, por lo que se le aplicó la atenuante de drogadicción y se le impuso la pena de diez meses de cárcel.n
