El edil de urbanismo quiere presentar a los grupos de la oposición el documento refundido a principios de julio
Mientras el equipo redactor del Plan Xeral de Ordenación Municipal trabaja a destajo para incorporar las alegaciones avaladas por los informes técnicos y adaptar el documento a la nueva Lei do Solo de Galicia, un requisito no contemplado en el contrato y que supondrá un aumento de las condiciones económicas -unos 90.000 euros- para el Concello, quedan por emitir los informes sectoriales de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, de Carreteras y Patrimonio, una condición indispensable para lograr el documento refundido.
"No se puede llevar adelante un plan sin estos informes y creo que los conseguiremos pronto, en un mes y medio, y con resultado favorable", explica el concejal de Urbanismo, José Cudeiro, tras las reuniones mantenidas durante los últimos meses con estos departamentos.
Una vez logrado esto, el edil asegura que el equipo redactor se compromete a presentar el documento refundido, en el que ya están trabajando para incorporar en el momento que se pueda, los informes sectoriales y así trasladárselo a los grupos de la oposición para que valoren el proyecto. Sería una vez conseguido el aval del resto de formaciones cuando se iniciaría su tramitación pidiendo el informe ambiental a la Xunta, que resolvería en el plazo de unos tres o cuatro meses, para poder llevar el PXOM a pleno y lograr su aprobación provisional, solo pendiente para ser definitiva de un informe de Urbanismo del Gobierno gallego y un nuevo regreso al pleno del Concello.
Sin embargo, Cudeiro advierte de que podrían existir problemas durante el proceso. "A raíz del documento refundido y los informes sectoriales, si por oportunidad política o los técnicos deciden, podría haber una nueva exposición pública con toda la problemática que puede suponer", comenta el edil, una situación que dilataría durante varios años el proceso y, en consecuencia, la inseguridad urbanística que reina en estos momentos en la ciudad al contar con un plan de 1986.
Poco respaldo
Los otros dos grupos con representación en el Concello, Democracia Ourensana y Ourense en Común, muestran su escepticismo con el borrador que está perfilando el gobierno local y dejando claro que, en estos momentos, no apuestan por apoyar el PXOM.
El portavoz de Democracia Ourensana, Gonzalo Pérez Jácome, considera que el documento "no es nada ambicioso con el diseño de la ciudad" y que da lugar "a respetar todos los pelotazos cometidos en los años anteriores, que se mantienen". El abogado Amadeo Rodríguez, que asesora a la formación en este tema, confirma que "existen reservas importantes", aunque prefiere esperar hasta conocer el documento definitivo.
Por su parte, el portavoz de OUeC, Martiño Xosé Vázquez Mato, destaca que el PP pretende incorporar una serie de alegaciones "de carácter político", para las que piden un respaldo técnico. "Non analizan o plan desde un punto de visto estratéxico, son cambios na edificabilidade, peticións concretas e iso non debería ser o urbanismo", explica Vázquez Mato, que se muestra, sin embargo, dispuesto a mostrar su apoyo siempre que esas medidas sean respaldadas técnicamente, pero añade que "se seguimos así, non chegaremos a bo porto".
Barquero, del PSOE, insiste en que su grupo no va a dar su respaldo si no se realiza, fundamentalmente, una adecuada integración del AVE, con un desarrollo urbanístico en A Ponte digno, el que la ciudad se merece; de ahí sus reticencias a avalar el modelo que ha adoptado ahora el gobierno popular en minoría.
Enfrente de la vía política, los constructrores, empresarios y propietarios de fincas urbanas presionan para que el Plan se agilice, se flexibilicen las condiciones de edificabilidad, fuera de ordenación y construcción en el rural, y para que la seguridad jurídica sea absoluta. n
