El secretario de Os Cogordos señala que "hay muy pocas especies y muy poco desarrolladas"
La prolongación del régimen de tiempo seco y soleado que está viviendo la provincia de Ourense, al igual que el resto de Galicia, está afectando de forma muy negativa a una de las producciones estrella de los montes ourensanos, las setas. Avelino Fernández, secretario de la asociación Os Cogordos, no duda en afirmar que se presenta una temporada mala para los amantes de las setas. "El suelo está totalmente deshidratado, hay muy pocas especies y las que hay están en unas condiciones de sequedad terribles", explica.
Añade, a modo de ejemplo reciente: "Este fin de semana pasado estuvimos en la zona de O Courel, que suele tener abundancia de especies, y sólo encontramos algún poliporus, alguna amanita muscaria, alguna amanita sicilina... pero todas ellas estaban muy poco desarrolladas y, sobre todo, muy secas".
Reconoce que se presenta "un año muy malo, no ha llovido nada y aunque llegaran ahora las lluvias coincidirían ya con las primeras heladas", por lo que se da la temporada "casi por perdida". Y es ya "el segundo año que acumulamos con esta escasez de setas, pero este año creo que está siendo peor todavía".
En los alrededores de Ourense se reproduce esta situación, puesto que zonas de abundancia en hongos y setas como puede ser el municipio de Nogueira de Ramuín "ya me están diciendo los compañeros de la asociación que tienen el mismo problema de pocos ejemplares, deshidratados o poco desarrollados", explica Fernández.
Este año se está dando sobre todo el bolletus frangans -comestible de calidad media-, que es una especie que necesita calor, "pero le falta la humedad mínima y eso penaliza también a estos ejemplares en su desarrollo".
peligro
La temporada de recogida de setas en la provincia de Ourense se inicia tradicionalmente a mediados de septiembre y se suele prolongar hasta principios del mes de diciembre, cuando llegan el frío y las heladas que acaban con la mayor parte de ellas.
"Este año se puede ver en muchos casos el micelio de la seta, pero sin desarrollar, porque las condiciones de humedad no le han permitido crecer", apunta Avelino Fernández. Esta circunstancia se está traduciendo en un descenso importante de setas y hongos con respecto a años anteriores.
Esta escasez de ejemplares en buen estado, señala el secretario de la asociación micológica Os Cogordos, lleva en más de una ocasión a los aficionados "a buscar otras variedades alejadas de las que cogen habitualmente" y eso puede traducirse "en un mayor riesgo de intoxicaciones entre los aficionados a la micología".n
