SECTOR EMPRESARIAL

Agrobiotech permitió más de 130 encuentros empresariales

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photo_camera Rubén Pérez y Susana Gulín.

La innovación vitivinícola o los alimentos funcionales marcaron la jornada de clausura en la Tecnópole

 

La segunda edición de Agrobiotech, que cerraba ayer sus puertas, facilitó la realización de 134 reuniones entre empresas para hacer contactos comerciales. Además, 27 pequeñas y medianas empresas mostraron más de un centenar de productos innovadores, entre ellas varias ourensanas, como el laboratorio Akunatura, que presentó en estos dos días de encuentro del sector su "marca de calidad alimentaria, que avala que un producto determinado cumple con las auditorías y controles analíticos que avalan su calidad como producto gourmet", señala Alberto Martínez, responsable de esta marca. 

Además, se desarrollaron una docena de ponencias especializadas, donde se pudieron conocer las últimas tendencias de los sectores de la biomasa, la biotecnología y la agroalimentación. La sostenibilidad, la eficiencia y la adaptación a los conceptos de la fábrica del futuro y de la conectividad fueron ideas coincidentes durante las sesiones como desafíos compartidos para los tres ámbitos de actividad investigadora e industrial.

Por otra parte, durante la jornada de ayer fue presentada la primera incubadora de proyectos de investigación en el ámbito del descubrimiento de nuevos fármacos de España, que nació en Galicia gracias a una fórmula de colaboración "pionera entre la Administración pública y la iniciativa personal", según señalan desde la Tecnópole. El acuerdo entre la Xunta, la Fundación Kaertor y la multinacional Jansenn, propietaria de Johnson, está permitiendo la captación de ideas procedentes de todo el mundo para que se desarrollen en la incubadora gallega.

parque Tecnológico. 27-10-2017. Agrobiotech, feria de imnovación. Susana Gulín. Paz“Nuestro estudio preverá los hongos en el viñedo”

Susana Gulín es responsable del departamento de Enología de Viña Costeira y presentó en Agrobiotech un proyecto a nivel nacional, en colaboración con el Campus de Ourense, Monet Ingeniería, la bodega Hacienda Monasterio y Feuga, que consiste en "desplegar estaciones meteorológicas por las cuatro denominaciones y en distintos puntos de las mismas para volcar los datos en unos algoritmos matemáticos que nos darán una predicción de las infecciones fúngicas del viñedo (botritis, mildiu...)". De este modo "podremos estar alerta de esa incidencia" y también "reducir el número de fitosanitarios".

El objetivo final es "obtener una uva sana que se traduzca en vinos caracterizados por la excelencia", añade. A estos datos se unirán otros recogidos en unos captadores de esporas de esos mismos hongos para "correlacionarlos con los del polen y los meteorológicos para optimizar la producción", señala Gulín.

Este proyecto fue el "segundo mejor valorado a nivel nacional por el Ministerio de Agricultura", que es el que sufraga la investigación, aportando una cantidad inicial de casi 100.000 euros "para la primera fase, correspondiente a la elaboración del proyecto", apunta la responsable de Enología en la bodega ourensana.

Este estudio se desarrollará a lo largo de tres años, "porque dos lo considerábamos insuficiente para hacer las correlaciones de datos", señala Gulín, que subraya la importancia de que abarque diversas zonas climáticas –atlántica, mediterránea...–.

parque Tecnológico. 27-10-2017. Agrobiotech, feria de imnovación.Rubén Pérez. Paz“Elegiremos la mejor fecha de vendimia con drones”

El director técnico de Ponte da Boga, Rubén Pérez, explicó en este foro de innovación y alimentación "cómo una pequeña o mediana empresa puede apostar por la innovación". En este sentido señaló como esenciales "las relaciones personales con los centros tecnológicos y de innovación que te permitan desarrollar ese proyecto en tu empresa", así como las ayudas a las que estas empresas, que tienen unos recursos limitados, pueden acceder para desarrollar la I+D+i "vía empresas de capital-riesgo, generalmente públicas".

Pérez apunta que para una pyme es importante "que entre en un consorcio, porque su capacidad para abarcar es pequeña".

En concreto, en Ponte da Boga están desarrollando un proyecto con apoyo autonómico y colaboración con la Universidad de Santiago y diversas empresas tecnológicas destinado a que, a través de fotografías realizadas del espectro de radiación del viñedo por drones, determinar el punto exacto de maduración de cada  uva por su tono cromático. "Con esto, conseguiremos prever cuál es el momento óptimo de vendimia en cada píxel de tu parcela, cuando hasta ahora se hace con un examen aleatorio que no sería tan exacto como este mapa cromático realizado desde el aire", señala Rubén Pérez.

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