Familias y empresas acumulan 7.078 millones en depósitos, un 1,1% menos que un año antes

El ahorro cae por primera vez desde que empezó la crisis

A pesar de la crisis, las familias y empresas ourensanas habían conseguido elevar su nivel de ahorro en los últimos años, pero en 2012 ya no han conseguido hacerlo. Los datos a nivel provincial muestran que, por primera vez desde el inicio de la crisis, el importe total de los depósitos en Ourense se redujo con respecto al ejercicio anterior.
En concreto, las cifras que recoge el Instituto Galego de Estadística a partir del Banco de España muestran que, al cierre del año pasado, el volumen de depósitos que los ourensanos acumulaban en entidades bancarias ascendía 7.078 millones de euros, tras sufrir un descenso del 1,1% con respecto al de 2011. Hasta ese momento, el importe total de los depósitos bancarios en la provincia había crecido año a año.

En lo que respecta al resto de provincias gallegas, también en A Coruña y Lugo crecieron los ahorros hasta 2011, pero en 2012 ya descendieron. Por el contrario, en Pontevedra lo habían hecho hasta 2010, pero en los dos últimos años acumulan una caída muy fuerte. En el conjunto de España, la caída también se viene produciendo desde 2011.

Mientras, los créditos pendientes de pago llevan en descenso en la provincia ya desde el año 2008. A finales del año 2012, las empresas y familias ourensanas adeudaban a las entidades financieras 4.000 millones de euros, un 15% menos que un año antes. Se trata del mayor descenso registrado desde que comenzó la crisis. En el conjunto de Galicia, la concesión de crédito se mantuvo al alza hasta 2009 pero desde entonces se reduce, siendo también el ejercicio de 2012 el de mayor reducción.

No obstante, cabe destacar que, a nivel provincial, el ahorro supera ampliamente a las deudas, ya que el importe de los depósitos en la provincia excede en más de 3.000 millones al de créditos. En el conjunto de Galicia no se registra este margen (hay casi 52.000 millones en créditos pendientes de pago, frente a casi 51.000 en depósitos), siendo Lugo y Ourense las que tienen 'superávit', al contrario de Pontevedra y A Coruña.

El IGE recopila también los datos del Banco de España sobre la presencia de oficinas de entidades financieras, según los cuales Ourense perdió en el año 2012 un total de 13 sucursales, quedándose con 268. La mayor caída, no obstante, se había registrado en 2011 (coincidiendo con el grueso de la reestructuración de Novagalicia Banco, tras la fusión de las antiguas cajas), cuando perdió 73. Desde el inicio de la crisis, en la provincia se han producido 107 cierres.

Mientras, en Galicia se perdieron 131 sucursales en 2012 y son ya 507 las clausuradas desde 2008 (la mayoría también en 2011).

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