Llegó a tener seis establecimientos en Ourense, Lugo y Pontevedra y una plantilla de 52 trabajadores

Almacenes Reverter también cierra arrastrado por la crisis

La crisis continúa su martilleo incesante sobre el tejido económico de la provincia y su última víctima de una de las empresas emblemáticas del sector de la construcción ourensano, Almacenes Reverter.
Con más de cien años de historia, la firma cerró sus puertas y para el próximo día 18 de noviembre está convocada una junta general extraordinaria de esta entidad mercantil, en cuyo orden del día figura como primer punto la disolución de la entidad 'ante las pérdidas producidas que han dejado reducido el patrimonio neto a una cantidad interior a la mitad del capital social'.

Según confirmaron fuentes de la propia empresa, todos los establecimientos de la entidad se encuentran cerrados y los motivos, señalaron, es la profunda crisis que atraviesa el sector de la construcción en los últimos años.

Almacenes Reverter, con más de cien años de historia a cuestas, llegó a contar con seis establecimientos comerciales, desarrollando su actividad en las provincias de Ourense, Pontevedra y Lugo. Tres de ellos estuvieron ubicados en Ourense: la sede central, en la calle del Progreso, un almacén de materiales de construcción en el polígono industrial de San Cibrao das Viñas y una tienda de la división Reverter MundoBaño, ubicada en la calle Río Arnoia.

Asimismo, gestionó un establecimiento de venta de materiales en Lugo y otras dos tiendas de la sección Mundobaño, ubicadas en Vigo y Vilagarcía de Arousa.

Según fuentes de la propia empresa, Almacenes Reverter llegó a tener 52 trabajadores en plantilla.

El presidente de la Asociación de Empresarios de la Construcción, Eligio Nieto, tras reconocer que 'fue una gran empresa, de gente seria y cuyos responsables trabajaron mucho', lamenta que la crisis la haya llevado al cierre, al igual que otras muchas. Sin embargo, Nieto confía en que la situación vuelva a remontar pronto. 'Yo creo que el sector ya tocó fondo y la crisis se nota menos que el año pasado', afirma, para añadir que las empresas ourensanas están haciendo un 'enorme esfuerzo para salir adelante'.

Recuerda que la construcción tenía en Ourense hace cinco años 15.500 empleos directos, que en este año se redujeron a 9.000. Además, generaba otros 65.000 empleos indirectos, más los fabricantes.'Los gobernantes debían percatarse de que la construcción es una gran industria y mientras este sector no salga adelante, el país no saldrá de la crisis', concluye Eligio Nieto.

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