Empezó su carrera en el Conservatorio de Ourense, luego se trasladó al de A Coruña y una beca Erasmus la llevó a Maastricht, desde donde la ourensana María Domínguez sigue formándose como pianista, dando clases y preparando con otros dos españoles el proyecto "Contenco"
Empezó su carrera en el Conservatorio de Ourense, luego se trasladó al de A Coruña y una beca Erasmus la llevó a Maastricht, desde donde la ourensana María Domínguez sigue formándose como pianista, dando clases y preparando con otros dos españoles el proyecto "Contenco", con el que pretenden crear nuevos lenguajes artísticos.
¿Cómo acaba fuera de España?
A medida que pasan los años te das cuenta de que necesitas buscar nuevos centros en los que te puedan aportar lo que buscas. Ahora mismo estoy intentando especializarme en la música contemporánea, que es algo más específico y en Galicia no tiene tanta cabida.
Menciona la diversidad de Maastricht, ¿influye al hacer un nuevo proyecto?
Queremos inculcar en esta ciudad, o en todos los sitios que fuese posible, un tipo de concierto nuevo y diferente. Aquí, que somos un trío de tres personas españolas, decidimos basarnos en nuestras raíces y en ese lenguaje musical que tenemos, y que es el flamenco y aportarle una parte más experimental. Queremos aportar algo nuevo a esa diversidad que hay en Maastricht. Evidentemente, ellos tienen escuelas de flamenco, pero no es lo mismo.
¿Cómo surge “Contenco"?
Me gusta trabajar con diferentes ramas artísticas y este año se me planteó la oportunidad de trabajar con un bailaor muy conocido en Andalucía y le propuse esta idea; que fueran dos ramas musicales diferentes y buscar un lenguaje en común. Él estuvo de acuerdo, le encantó la idea y nos pusimos manos a la obra y luego decidimos incorporar a un percusionista para añadir la base rítmica. Yo tenía en la mente hacer algo con danza, lo conocí y me encantó, le sugerí si sería posible trabajar juntos.
¿Cómo está siendo el inicio?
El proyecto está empezando desde hace unos meses. En diciembre, tenemos un presentación en Maastricht y ahora estamos en un momento de desarrollo, pero a partir de dos o tres meses queremos dar los máximos conciertos posibles.
Tienen la intención de crear nuevos lenguajes y expresiones artísticas, ¿cómo se hace cuando parece que está todo creado?
Todo está inventado pero es más que nada la forma de expresión. Siempre se ha conocido al flamenco desde un punto de vista muy tradicional y esa concepción de que puede darse con una guitarra y un cajón flamenco. La idea es aportar esa parte más experimental. Pasa lo mismo con el piano, hay una tradición clásica muy fuerte, parece que el pianista es el que toca la música de Mozart o Chopin y nosotros pretendemos aportar un nuevo repertorio basado en compositores actuales, apoyando a esos nuevos compositores que están saliendo ahora, y que esté basado en la tecnología, tocamos con música electrónica también. Es un nuevo lenguaje en el que se intenta unir la tradición con la vanguardia, con todas estas nuevas corrientes y elementos que están apareciendo.
¿Cuál es su repertorio? ¿Cuentan con piezas propias?
Tenemos obras tanto de compositores españoles puramente más flamencas, de compositores de toda Europa, que aportan la parte más contemporánea y luego tenemos temas propios. Hay un tema compuesto por el percusionista de Contenco. Muchas veces hay obras creadas puramente contemporáneas y nosotros a través del baile y de nuevos elementos que vamos incorporando añadimos esa parte flamenca y al revés.
¿Qué proyectos tienen? ¿Les gustaría tocar en casa?
Tenemos un concierto en diciembre y dos planeados en el 2018. Sería estupendo tocar ahí, pero necesitaríamos el lugar y las condiciones, si se dan, ¿por qué no? Siempre estoy encantada de tocar en casa, aunque a veces parece más complicado que tocar fuera.
