Dos individuos asaltaron en la madrugada de ayer a una hostelera de Xinzo, Graciela G.F., cuando se dirigía a su domicilio en Pereiras (Taboadela) después de obligarla a parar el turismo que conducía y golpearla en la cabeza.
Los ladrones se apoderaron de 900 euros, la recaudación que había logrado la víctima durante el día en su local.
El asalto se produjo pasadas las doce de la noche del martes cuando Graciela G.F. se dirigía en un coche Renault hacia su domicilio tras dar por finalizada la jornada laboral. Cuando ya estaba prácticamente en el núcleo de Taboadela, se encontró con un turismo cruzado en la carretera por lo que decidió parar al considerar que podría tratarse de un accidente, según fuentes de la Guardia Civil.
Pero sus sospechas pronto se esfumaron al encontrarse con dos individuos, que estaban ocultos en la cuneta y cubrían el rostro con capuchas. Sin mediar palabra, uno de los ladrones la golpeó con un objeto, posiblemente un palo, en la cabeza, mientras el otro se apoderaba del dinero en el interior del vehículo, dándose acto seguido la fuga.
La empresaria alertó a la Guardia Civil que estableció un amplio dispositivo en la zona, aunque en la noche de ayer aún no había logrado identificar a los dos ladrones. Los agentes sospechan que conocen perfectamente a la hostelera y el local que regenta.
El asalto se produjo pasadas las doce de la noche del martes cuando Graciela G.F. se dirigía en un coche Renault hacia su domicilio tras dar por finalizada la jornada laboral. Cuando ya estaba prácticamente en el núcleo de Taboadela, se encontró con un turismo cruzado en la carretera por lo que decidió parar al considerar que podría tratarse de un accidente, según fuentes de la Guardia Civil.
Pero sus sospechas pronto se esfumaron al encontrarse con dos individuos, que estaban ocultos en la cuneta y cubrían el rostro con capuchas. Sin mediar palabra, uno de los ladrones la golpeó con un objeto, posiblemente un palo, en la cabeza, mientras el otro se apoderaba del dinero en el interior del vehículo, dándose acto seguido la fuga.
La empresaria alertó a la Guardia Civil que estableció un amplio dispositivo en la zona, aunque en la noche de ayer aún no había logrado identificar a los dos ladrones. Los agentes sospechan que conocen perfectamente a la hostelera y el local que regenta.
