Su vehículo, un furgón de la concesionaria de mantenimiento, quedó semisuspendido sobre las vigas de hormigón del túnel del tren, después del brutal impacto por alcance de otra furgoneta
Un conductor de la empresa Matinsa, encargada del mantenimiento de la autovía A-52, entre As Estivadas y Melón, José Antonio Nogueiras Morales, de 51 años y natural de Vilar de Santos, falleció ayer en una brutal colisión por alcance entre dos furgones, justo en uno de los enlaces de la vía de alta capacidad en Ribadavia. La conductora del otro vehículo, E.R.M.V, de 34 años, que transportaba pescado para un supermercado, resultó ilesa. Dio negativo en la prueba de alcohol y drogas, según fuentes de Tráfico.
El fallecido realizaba trabajos de mantenimiento y en el momento de la colisión, a las 09,20 horas, estaba dentro del furgón, que fue desplazado fuera de la calzada, quedando semisuspendido en un el falso techo de un túnel de la vía férrea. El cadáver del operario de conservación tuvo que ser excarcelado, tarea que llevó cerca de dos horas y media a los servicios de emergencia, que primero tuvieron que estabilizar el vehículo al temor de que cayera a la vía del tren. El accidente obligó a cortar el tráfico ferroviario durante más de tres horas, lo que ocasionó retrasos en un convoy entre Vigo y Ourense.
Al lugar se desplazaron los servicios sanitarios del 061, el Grupo de Emergencias de Ribadavia (GES), bomberos de O Carballiño y varias patrullas de la Guardia Civil de Tráfico. El siniestro obligó a cortar más de dos horas un carril de la vía de alta capacidad.
La carretera OU-536 (Ourense-Trives) fue escenario pasadas las once horas de otra colisión entre dos coches a la altura de Pereiro de Aguiar, que se saldó con dos personas heridas.
