EN OURENSE

Un barrio en busca de nueva vida

Paseantes en el Casco Vello, con locales vacíos a los lados (MARTIÑO PINAL).
photo_camera Paseantes en el Casco Vello, con locales vacíos a los lados (MARTIÑO PINAL).
El Casco Vello sur lanzaba un SOS hace una semana. Los edificios se caen, las alcantarillas y la iluminación son obsoletas y la delincuencia se deja notar ante el gran abandono. "Xa intentaron entrar varias veces no local parroquial". 

El ambiente en el barrio del Casco Vello es de tristeza. Cabizbajos, muchos vecinos se tomaron como un auténtico puñal en su orgullo la noticia de la trágica muerte de 'Joaquín', conocido en la calle, amable, y sin duda, uno de los que más dinamizaba la vida de la rúa Colón, ahora huérfana de bares tras su fallecimiento. "Estamos muy dolidos, no lo esperábamos, es una sorpresa", confesaban dos vecinas en la misma calle. Ellas suponen que todo viene de la delincuencia de la zona, en la que han notado un incremento en las últimas semanas. 

Las feligresas que salían ayer de la misa en la iglesia de la Trinidad, en obras, no daban crédito a la última noticia sobre el homicidio. "Isto está moi mal, hai moito abandono e xa o notamos tamén na igrexa. Unha vez roubáronnos o mantel do templo e despois de preguntar por negocios da rúa acabou aparecendo de novo", señala una de ellas. Confiesan que ya han intentado forzar la persiana de acceso al local provisional donde dan misa, por lo que sospechan que los ladrones acechan. "Nós notamos esa degradación, falta seguridade, intentáronnos entrar varias veces e tiveron que poñer alarma, e iso que aquí non hai nada. 

No son pocos los vecinos los que defienden el barrio, están orgullosos del mismo, aunque se sienten abandonados. "Estas noticias no ayudan, pero hay que seguir adelante", confesaba ayer uno de los hosteleros del Casco Vello sur. 

Tienen muchas tareas pendientes, el mayor abandono de bajos comerciales de la ciudad, problemas con el saneamiento, alza de alquileres... "Temos unha marabilla de Casco Vello, só hai que potencialo e baixar os alugueres", sostiene uno de los residentes.

"Isto matouno a droga, desde entón non levantamos cabeza, é unha zona delicada", afirma otro de los vecinos de la rúa Colón, justo enfrente del bar donde apareció el dueño fallecido, y que no ocultaba su desafección por el estado actual. Es lo mismo que afirma el camarero de un bar de la zona. Ahora intentan levantar cabeza, pero entre pisos abandonados y a medio caer se les hace imposible. "A zona está moi mal, só hai que velo, da Praza Maior ata aquí dá moita pena", señala otra de las vecinas que sale de misa pasado el mediodía.

Las sensaciones en el Casco Vello no son buenas, las inmobiliarias advertían hace poco más de una semana del "abandono" que estaba causando que se fuera convirtiendo, poco a poco, en un "guetto".  "A este bar venía gente de esta calle, o de las calles de al lado, era todo gente conocida, ¿quién va a venir aquí, a esta calle, si no hay nadie?", afirma otro de los residentes en la zona.


Propuestas


Las noticias de fallecimientos no ayudan a una zona deprimida pero con ganas de salir para arriba. "Hay que limpiar los grafitis asquerosos de las puertas, rehabilitar las fachadas, quitar la droga en los pisos y la prostitución", critica otro de los vecinos. 

La seguridad, pese a todo, sí que ha ido in crescendo en las últimas semanas. Cada cuarto de hora pasa una patrulla de la Policía Local. "Desde que entraron os axentes novos téñenos por aquí dando voltas sempre", confirma un vecino. Un aumento de seguridad necesario, sí, que, sin embargo, contrasta con la escasez de buen alumbrado público (y que funcione) que tantas veces han reclamado en la asociación vecinal. 

Te puede interesar