El bloqueo de la Raia mantiene cerrados a decenas de negocios

Los negocios que surgieron en las tres últimas décadas aprovechando la singularidad que ofrecía la Raia entre la provincia de Ourense y Portugal están de capa caída a causa del cierre de los pasos fronterizos. La mayoría –restaurantes, casas de turismo rural, panaderías, bares, gasolineras, empresas de aventura, ocio y turismo– mantiene en sus puertas colgado el cartel de cierre y las que menos funcionan a medio gas. "Vendemos dos cafés y dos botellas de agua. Esa es la actividad de todo el día", afirmaba el gerente del restaurante Lindo Verde, Máximo Rodrigues. Este negocio está situado en Lindoso (Portugal), nada más rebasar la frontera de A Magdalena (Lobios). "Nuestros clientes son los transportistas, los conductores que cruzan por la frontera. Tenemos distintos menús, pero ahora mismo la cocina está parada porque no hay tránsito al estar la carretera cortada. Si no abren, tendremos que cerrar", añade el hostelero. A escasa distancia, pero ya en el municipio de Lobios, está el restaurante que tomó el nombre del paso fronterizo: A Magdalena. "El cierre de la carretera se nota bastante. Estamos trabajando con los clientes de la provincia", afirman en el local. Tanto los vecinos de Lobios como los de Lindoso, son junto con los de los municipios ourensanos de Padrenda Muíños, Lobeira, Entrimo y los portugueses de Arcos de Valdevez, Terras do Bouro y Melgaço, los más perjudicados, dado que para llegar a los pueblos de un lado y otro son obligados a dar un rodeo por los pasos oficiales de Feces (Verín) o Tui (Pontevedra). Solo en la localidad portuguesa de Soajo, lindante con Olelas (Entrimo), hay ocho restaurantes que sobreviven con las visitas al Parque Nacional de Peneda Gêres. "Estamos abiertos, pero sin clientes", afirma uno de los hosteleros. Lino Perdiz se puede denominar como activista de las relaciones transfronterizas. Este empresario de Muíños regenta Autos Perdiz y en los últimos años aprovechó la belleza que ofrecen los parques naturales de O Xurés y Peneda Gêres para programas excursiones y viajes de ocio, senderismo y termalismo, entre otras actividades. "Dependemos un pouco do aeroporto do Porto e agora mesmo está todo parado. Ca fronteira pechada non hai unha soa reserva", lamenta, puntualizando que todas las semanas venían organizando cenas y partidos de fútbol con los vecinos de los pueblos lusos. "A actividade que tiñamos está parada", recalca. La falta de clientela a causa del cierre de los pasos fronterizos también se está notando en los restaurantes de Montalegre. Este municipio luso tiene su principal salida hacia Baltar. En la misma frontera abrió hace más de dos décadas una estación de servicio. "Por la semanas estamos cerrados. Abrimos el sábado y domingo pero solo lo que es la tienda", afirman en el negocio. La falta de tránsito al estar la carretera cortada no solo los obligó a echar el cierre, también a contratar a un empresa de vigilancia para que custodie las instalaciones y evitar un robo. Los empresarios cuantifican las pérdidas por el cierre de la frontera en millonarias. Cándido Nóvoa es presidente de los areneros de A Limia. "Estamos vendiendo, pero la mayor parte de los transportistas son de Chaves. Lo que es la parte de Lindoso hubo un bajón al estar la carretera cerrada", asegura. Baltar recuerda que Tourem cruza su municipio hacia Portugal La Corporación Municipal de Baltar acordó por unanimidad el pasado día 3 en sesión plenaria dirigir escritos al Ministerio del Interior, Xunta de Galicia, Delegación del Gobierno y Diputación, en lo que manifiesta su "indignación polo trato discriminatorio absoluto recibido co municipio de Baltar tras apertura de paso fronterizo de Calvos-Tourem", dice el acuerdo plenario. Los ediles argumentan, además, que el paso fronterizo de Baltar "conta con razón infinitamente superior para proceder a súa reapertura". En este sentido, recuerdan que los vecinos de Tourem utilizan el paso fronterizo de Baltar para comunicarse con su capitalidad municipal a la hora de acudir a la Cámara Municipal, a una consulta médica o realizar compras. El grupo municipal del PP de Xinzo se sumó ayer a la petición de la reapertura de los pasos fronterizos. Insta al grupo de gobierno a abordar este tema en una junta de portavoces. El cierre de los pasos fronterizos, además de las pérdidas económicas, está ocasionando perjuicios a decenas de trabajadores, que el pasado viernes tuvieron que soportar largas caravanas en el paso de Feces de Abaixo a la hora de desplazarse a sus domicilios. Julio Rodrigues conducía una de las múltiples furgonetas que esperaban a pasar el control policial. "Trabajamos en Asturias y regresamos como cada fin de semana para estar con la familia", aseguraba, puntualizando que en la madrugada del lunes también se registran retenciones, pero son al revés, para entrar en España, al regresar los trabajadores para incorporarse de nuevo a sus puestos. "Los que somos de Chaves aún no tenemos mucho problema. Pero está los que tienen que continuar el viaje hasta la zona de Braga", lamenta el trabajador.