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Bomberos y Sergas piden calma ante la expansión de la velutina

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photo_camera Los bomberos retiran un nido en la noche de ayer en una vivienda de la calle Alexendre Bóveda.

El avance de la especie invasora no se traduce, de momento, en más afectados por picaduras 

Aumenta el temor a las avispas velutinas. Llega alimentado por las tres muertes por picaduras de avispas en Galicia en apenas siete días. La última vícitma, Manuel Fernández Pérez, de 65 años, de Pereda (San Cristovo de Cea), que falleció atacado por una avispa (autóctona), cuando trabajaba segando la hierba en una finca. Pero las expertos piden calma. Los Grupos de Intervención de Emergencias (GES), Bomberos, Sergas y Medio Rural lanzaban ayer mensajes de "tranquilidad", coincidiendo que las "avispas velutinas –en expansión por la provincia– son igual de peligrosas que las autóctonas".

Los efectivos del GES de Ribadavia llevan años destruyendo nidos de velutinas y, según su responsable, Julio Puentes, en este verano no están detectando más nidos en la comarca: "Tenemos los mismos avisos que el año pasado, unos cuatro o cinco cada mes". Recalca que se está generando un alarma sin fundamento "porque ya nos llamaron porque vieran una velutina volando cerca de su casa".

Los bomberos de la ciudad sí detectaron la presencia de más nidos. Ayer se disponían a retirar cinco. No es algo excepcional, dado que durante este mes llevan una media de tres por día. "En la ciudad encuentran el ambiente perfecto, la humedad del río y calor, Además, a este tipo de avispas les gusta la ciudad porque encuentran más comida, basura", aseguró el sargento Muñoz, recordando que la especie no es más agresiva que las avispas autóctonas:"Si no las tocas no atacan". Los bomberos, que denuncian que solo disponen de dos trajes para este servicio, detectaron que últimamente aparecen nidos en cornisas, lo que genera más alarma. "El único problema es que es una especie invasora que mata a las abejas autóctonas", añadió el sargento.

La velutina avanza por la cuenca del Miño. Los efectivos de emergencia llevan retirados 211 nidos en la provincia, 3.282 en el resto de Galicia. En el CHUO no se detectaron más pacientes por picaduras que en otros años.


Dos casos por una  "alergia exagerada" esta semana en  Urgencias del CHUO


Desde el Servicio de Urgencias del CHUO  llamaban ayer a la tranquilidad y, tras  recordar que no se detectó un aumento de ingresos por picaduras de avispas, aclaraban que durante esta semana atendieron dos casos en los que hubo una "reacción alérgica exagerada", que afortunadamente no tuvieron consecuencias graves. En el CHUO vienen atendiendo una media de entre dos y tres casos por picaduras de avispas cada semana, los mismos que en años anteriores. Todos fueron por "reacciones cutáneas leves".

Según los datos del Sergas, 159 ourensanos están a tratamiento de inmunoterapia, vacunación efectiva en el 97% de los casos, para limitar el riesgo de una reacción alérgica grave. Recomiendan que los pacientes alérgicos deben llevar siempre un kit de emergencia con una inyección de adrenalina y antihistamínicos o corticoides para ingerirlos tras la picadura del insecto. De los pacientes que están en tratamiento, un 63% son alérgicos al veneno de las avispas, en total 101. 

Ante una picadura, el afecto si siente mareos o que se siente  muy mal, colorea la piel y pierde respiración, debe acudir al médico, que será el que le realice todas las pruebas y tratamiento.  Los primeros momentos tras la picadura son fundamentals. 

En el Sergas recuerdan que la realización de las pruebas para conocer si se es alérgico o no puede facilitar sensibilización y desarrollar la alergia. 


Dos muertos por avispa autóctona y uno por asiática


De los tres fallecidos por picadura de avispas en la última semana en Galicia, solamente uno, un vecino de O Porriño, era de la especie velutina. El vecino de San Cristovo de Cea quedó demostrado que lo picó una avispa autótona cuando trabajaba en una finca, igual que la otra muerte registrada en Viveiro, en la provincia de Lugo.

Las avispas ya han ocasionado  más muertes en la provincia de Ourense en los últimos años. En mayo del 2011, falleció la suplente de una candidata a concejal el día de la elecciones municipales en Vilariño de Conso. Una abeja le picó cuando circulaba con su coche en dirección a la mesa electoral.

En agosto del año 2015, falleció un vecino de Zamora que se encontraba de visita en Garabelos (concello de Bande), tras sufrir otra picadura. 

Los insectos suelen ocasionar una veintena de muertes cada año en España, según los datos que maneja Sanidad.n

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