El botellón reaparece: “La policía no hace nada"

Con el inicio de la desescalada del ocio nocturno en la ciudad vuelve también el botellón a las calles del Casco Histórico. La noche del pasado sábado, varios grupos de jóvenes se reunieron en la Praza da Estrela y en el Parque de la Zapatilla, dos puntos ya habituales para el "copeteo" a pie de calle. Los vecinos de la zona decidieron llamar a la Policía Local durante el transcurso de la noche, ya que el ruido les impedía dormir. "Hablamos con ellos a las 3 y a las 4,15 horas y nada, no vinieron. La gente seguía aquí todavía pasadas las cinco y media de la madrugada", apunta uno de los afectados en la Praza da Estrela. Hace varias semanas, los inquilinos también llamaron a los agentes para requerir su intervención –varios grupos de jóvenes se encontraban bebiendo en la zona–, pero la Policía sí acudió entonces. "Las otras veces que llamamos vinieron y disolvieron, ayer –por el sábado– no apareció nadie", señalan. Desde O Cimborrio remarcan la necesidad de reforzar las patrullas de la Policía Local para dar respuesta. "Vecinos de Pena Corneira llamaron ayer –por el sábado– a la Policía Local porque era el ruido era un escándalo, la gente gritaba, llamaba a los timbres... La contestación fue que solo tenían 7 efectivos y que fuésemos a protestar al Concello. Eso haremos", señalan. La asociación recuerda la ordenanza de ruidos municipal: "La normativa recoge que no se puede hacer ruido en la calle, pero sin efectivos, no se persigue". Inseguridad La noche del pasado sábado 5 de julio, un joven resultó herido tras una pelea en la calle Pizarro, en la que una persona lo agredió con una botella. En la operación intervino la Policía Nacional, así como los servicios sanitarios. "Uno no duerme tranquilo sabiendo lo que hay en la calle, y sabiendo también que no tenemos quien nos proteja", apuntan desde O Cimborrio. Varios vecinos de la entidad han sido víctimas de ataques de los peatones, como pedradas en ventanas y puertas. La asociación asegura que todavía hay locales nocturnos que no respetan la normativa: "No se cierran puertas, los clientes beben en el exterior, se recogen las terrazas más allá de las cuatro de la madrugada, se ocupan zonas como el espigón de la Praza Maior...".