n n n El director de un instituto de Formación Profesional en Ourense explicaba en una ocasión cómo el progresivo acceso de la mujer a ciclos tradicionalmente masculinizados, véase la automoción, supuso una revolución en el centro. "Hemos hecho ya vestuarios femeninos", comentó. Un instituto de FP o una universidad exigen los mismos criterios de entrada para un alumno que para una alumna y, sin embargo, las políticas de igualdad no han conseguido todavía el equilibrio de mujeres y hombres en carreras científicas y en ingenierías. Fomentar las vocaciones femeninas desde la niñez es un reto que encuentra un aliado en el impulso a las competencias STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) desde las etapas educativas más tempranas. Para invertir los patrones, hay que poner los datos sobre la mesa: en el Campus de Ourense apenas hay mujeres en Informática o Aeronáutica. En Ciencias, la balanza también está desequilibrada a favor de los hombres, como ocurre en otras universidades. La brecha de género se inicia en las alumnas de las carreras, continúa en la investigación y en el reducido número de catedráticas frente a los catedráticos.
Se necesitan informáticas
La Escuela de Ingeniería Informática es consciente del bajo número de mujeres en estos estudios. Desde este centro ourensano impulsan planes para atraer el talento femenino. El desajuste es brutal: 462 matriculados frente a 59 matriculadas en el curso 2018-2019, según los datos de transparencia de la UVigo. No fue hasta el curso de 1999 cuando accedieron por primera vez las mujeres a esta ingeniería. Hubo tres cursos (1981, 1982 y 1984) solo con estudiantes hombres.
El grado en ADE e Informática, suprimido el curso pasado, arrancó en 2013 con siete hombres y dos mujeres. En el curso 2018-2019 había 33 hombres y 16 mujeres.
Aeronáutica desajustada
Ingeniería Aeroespacial, la titulación más joven del Campus, ha ido aumentando la brecha de género desde que se asentó en As Lagoas la Escuela de Ingeniería Aeronáutica. En el curso 2016-2017 se estrenaron 32 hombres y 18 mujeres. En 2018-2019 había 109 matriculados frente a 35 matriculadas.
En Ciencias depende de la titulación. El grado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos siempre tuvo más mujeres: en el último curso son 91 frente a 38 hombres. En Ciencias Ambientales se ha ido hacia atrás: desde 2010 hasta 2014 hubo más alumnas que alumnos, en los últimos cursos se invirtió el patrón: 115 hombres y 69 mujeres en el último curso del que hay datos.
Las ciencias, a medias
Parecido ocurre en Ingeniería Agraria: aunque siempre hubo más hombres que mujeres, el porcentaje era bastante equilibrado hasta los últimos cursos. Agraria tiene en 2018-2019 56 hombres y 36 mujeres.
Los datos de la otra titulación científica que existió en el Campus, Física, confirman siempre más presencia masculina que femenina en todos los cursos.
La investigación
El conjunto de la Universidad de Vigo tiene 627 miembros de grupos de investigación científicos: mujeres son 304, casi la mitad. La situación empeora en los grupos de investigación tecnológica: 467 miembros y solo 150 son mujeres, apenas representan el 32% del total. Si estos datos no parecen tan alarmantes, nos encontramos con la brecha de género cuando hablamos de investigadoras principales de cada grupo: solo hay 31 mujeres que sean las investigadoras principales de su grupo en Ciencias, son 98 los investigadores principales en total para este ámbito.
En Tecnología, son 11 las investigadoras principales de su grupo, de un total de 64 investigadores.
Las cátedras, masculinas
¿Cuántas catedráticas del ámbito científico hay en la UVigo? Una. Frente a 17 catedráticos hombres, según los últimos datos de la institución académica. ¿Y catedráticas en el ámbito tecnológico? Dos, frente a 12 hombres.
Faltan mujeres líderes
Si nos fijamos en la actividad por Campus y sexo del investigador principal, los resultados dicen que en la Escuela de Informática de Ourense hay cinco hombres investigadores principales frente a cero mujeres. En la Facultad de Ciencias, diez hombres frente a cinco mujeres. Son datos del 2018, el último curso que ofrece la web de transparencia de la UVigo. La Facultad de Ciencias expone seis grupos de investigación activos: ninguno coordinado por mujeres.
Pasos dados
Hay mucho camino por recorrer y las instituciones académicas son conscientes de ello. La Unidad de Igualdad de la UVigo trabaja en concreto desarrollando planes para fomentar el acceso de la mujer en la universidad. El Campus de Ourense organiza jornadas como "Experimenta en feminino" en el que las protagonistas son las investigadoras del Campus y los visitantes son los estudiantes de los centros educativos. Especialmente las estudiantes, que encuentran referentes para no abandonar sus vocaciones científicas. Empezando por las primeras etapas educativas, la robótica gana presencia en la Educación Primaria. Más adelante, el bachillerato especializado STEM, el que forma a los profesionales del futuro: en Ourense hay ya dos institutos que lo imparten. Hay mucho por hacer.
