Reclamar apoyo de las administraciones y del empresariado ourensano de cara a mantener la Cámara de Comercio fue el objetivo de un pleno que, con carácter extraordinario, se desarrolló ayer en la sede de la entidad, y con el que el comité ejecutivo instó a los vocales a plantear medidas para garantizar su futuro.
Dos años después del decreto que suprimió el pago obligatorio de cuotas por parte de las empresas, 'seguimos sin saber nada de la nueva ley' ni se sabe cuándo saldrá, según recordaba el presidente de la Cámara ourensana, Celso Barbosa. 'No hay un marco legal que establezca las funciones y el financiamiento', precisaba. En todo caso, descartaba de momento una reestructuración de la entidad ourensana, señalando que 'nuestro objetivo es trabajar para que se le asignen funciones y financiación'.
También el vicepresidente primero, Juan Carlos Parada, explicaba que la situación de la organización ourensana es estable por el momento, pero 'si continúa sin tener ingresos, no será viable y habrá que tomar medidas'. En todo caso, defendía que el objetivo fundamental es, por un lado, demandar al Gobierno central que apruebe la nueva ley y, por otro, instar a la Xunta que le asigne funciones y programas para su desarrollo. Añadía que 'también los empresarios deben valorar' si quieren que la entidad continúe existiendo. De momento descartaba una reducción de personal, pues 'lo primero es que la Cámara tenga continuidad y se le asignen funciones'.
Los vocales del pleno defienden unánimemente la continuidad de la institución, aunque coinciden en que a medio plazo será necesario reajustar su estructura. Piden, no obstante, que se le asignen funciones (como comercio exterior y formación) y señalan que la financiación debe venir del pago por parte de los usuarios de los servicios, pero con apoyo de las administraciones.
Así, Ovidio Fernández Ojea, que presidió la entidad entre 2004 y 2010, recordaba que la Cámara ourensana ha sido fundamental para creación de Expourense, en el impulso del centro comercial Ponte Vella o en la puesta en marcha de un vivero de empresas en el Parque Tecnológico. Por ello, señalaba que 'defiendo a ultranza la Cámara de Ourense', alegando que tiene un papel muy importante en la promoción del comercio exterior, 'que en estos momentos es tan necesario', o en la formación.
Otro de los vocales, Luis Rivera, señalaba que 'las Cámaras son necesarias, al igual que lo son en el resto de Europa y del mundo'. Por ello, defendía que se les asigne servicios, en áreas como comercio exterior, 'y no que se cierren las Cámaras y se creen otros organismos nuevos que los presten'.
Mientras, Alberto Vila señalaba su preocupación por la situación de incertidumbre que sufren las entidades porque 'penso que non hai un ánimo claro de darlles viabilidade'. En todo caso, 'as Cámaras cumpliron un papel de axuda a pymes que poden seguir prestando', aunque opina que será necesaria una reformulación, ya que, 'de seguir con esta indefinición, a súa subsistencia creo que é limitada'.
También José Manuel Díaz Barreiros defendía que las entidades se especialicen en determinadas funciones, como comercio exterior. 'Existe una red de Cámaras en todos los países del mundo, por lo que son muy útiles para cualquier empresa que se dedique a exportar'. En todo caso, entiende que los servicios que ofrece 'deben pagarse', si bien, como entidad pública que es, también las administraciones deben contribuir a su financiación.
Finalmente, Manuel Álvarez defendía que 'la Cámara tiene un papel muy importante para potenciar la actividad empresarial de la provincia'. Destaca que la entidad ourensana presta servicios relevantes 'que quizá es necesario dar a conocer más, pero todos los que los utilizan quedan satisfechos'.
También el vicepresidente primero, Juan Carlos Parada, explicaba que la situación de la organización ourensana es estable por el momento, pero 'si continúa sin tener ingresos, no será viable y habrá que tomar medidas'. En todo caso, defendía que el objetivo fundamental es, por un lado, demandar al Gobierno central que apruebe la nueva ley y, por otro, instar a la Xunta que le asigne funciones y programas para su desarrollo. Añadía que 'también los empresarios deben valorar' si quieren que la entidad continúe existiendo. De momento descartaba una reducción de personal, pues 'lo primero es que la Cámara tenga continuidad y se le asignen funciones'.
Los vocales del pleno defienden unánimemente la continuidad de la institución, aunque coinciden en que a medio plazo será necesario reajustar su estructura. Piden, no obstante, que se le asignen funciones (como comercio exterior y formación) y señalan que la financiación debe venir del pago por parte de los usuarios de los servicios, pero con apoyo de las administraciones.
Así, Ovidio Fernández Ojea, que presidió la entidad entre 2004 y 2010, recordaba que la Cámara ourensana ha sido fundamental para creación de Expourense, en el impulso del centro comercial Ponte Vella o en la puesta en marcha de un vivero de empresas en el Parque Tecnológico. Por ello, señalaba que 'defiendo a ultranza la Cámara de Ourense', alegando que tiene un papel muy importante en la promoción del comercio exterior, 'que en estos momentos es tan necesario', o en la formación.
Otro de los vocales, Luis Rivera, señalaba que 'las Cámaras son necesarias, al igual que lo son en el resto de Europa y del mundo'. Por ello, defendía que se les asigne servicios, en áreas como comercio exterior, 'y no que se cierren las Cámaras y se creen otros organismos nuevos que los presten'.
Mientras, Alberto Vila señalaba su preocupación por la situación de incertidumbre que sufren las entidades porque 'penso que non hai un ánimo claro de darlles viabilidade'. En todo caso, 'as Cámaras cumpliron un papel de axuda a pymes que poden seguir prestando', aunque opina que será necesaria una reformulación, ya que, 'de seguir con esta indefinición, a súa subsistencia creo que é limitada'.
También José Manuel Díaz Barreiros defendía que las entidades se especialicen en determinadas funciones, como comercio exterior. 'Existe una red de Cámaras en todos los países del mundo, por lo que son muy útiles para cualquier empresa que se dedique a exportar'. En todo caso, entiende que los servicios que ofrece 'deben pagarse', si bien, como entidad pública que es, también las administraciones deben contribuir a su financiación.
Finalmente, Manuel Álvarez defendía que 'la Cámara tiene un papel muy importante para potenciar la actividad empresarial de la provincia'. Destaca que la entidad ourensana presta servicios relevantes 'que quizá es necesario dar a conocer más, pero todos los que los utilizan quedan satisfechos'.
