La concentración de candidatos por metro cuadrado se dispara cada proceso electoral en el Campo da Feira; Begoña Conde, la cabeza de lista de Vox, es la "nota exótica", "¿por emigrante?", responde ella.
La campaña electoral tiene el embrujo de sentar a la mesa a sensibilidades políticas de variado pelaje. No se juntan para debatir, sino para comer a contados metros de distancia compartiendo el mismo techado. El Campo da Feira de Ourense dispara la concentración de políticos por metro cuadrado. En unos minutos se puede saludar al que aspira a representar a la provincia en el Congreso, al que desea ocupar una mecedora en el Senado, según la opinión generalizada de la institución, al alcalde de la ciudad, al exconcejal que en las municipales de mayo se batirá a bayoneta para birlarle la silla tras cambiar de camiseta a mitad de partido por sorpresa y al que todavía no está en una lista pero sueña con ese momento sin que se note demasiado.
Churrasco, carne ó caldeiro y pulpo á feira se convierten en un peligro para la dieta más rigurosa, a no ser que el candidato posea un metabolismo acelerado. Porque no hay feria sin candidato ni candidato que pueda resistirse al recorrido gastronómico. Begoña Conde, cabeza de lista de Vox al Congreso y tía de Santiago Abascal, está comprando el pan que ha encargado antes cuando el periodista llega al recinto. "No puedo resistirme a este pan de maíz, me recuerda al que me daba mi abuela", agasaja a la vendedora. "Eres la nota exótica de la campaña", comenta el periodista a modo de presentación. "¿Soy exótica porque soy emigrante", se revuelve con una tablas que no se le presuponían. "Llevo desde los 16 años en política. En el País Vaso soy la gallega y aquí la vasca", prosigue mientras su equipo la apremia para ocupar la mesa que han reservado. "Pero si estoy muy a gusto hablando de política y de que Orense es la gran desconocida", se disculpa. Se va dejando el aviso de que hay que mejorar las fotos que le publicamos. La responsabilidad es en la otra ventanilla.
El fotógrafo Óscar Pinal sigue a lo suyo y ya encañona con la cámara a Inés Iglesias, cabeza de cartel de Ciudadanos. José Araújo, exconcejal popular y ahora candidato a la Alcaldía, acaba de llegar y se hacen una foto de familia. Un espontáneo se cuela en la imagen y todos bromean. Quieren que pose con una carpeta naranja pero la rechaza sin moverse de la foto. Inés Rey hace un gesto para subrayar lo que estaba comentando un instante antes de la simpática escena. "La sensación que tengo es muy buena, la gente se acerca por la calle para manifestarnos su apoyo".Sólo hace falta que las urnas digan lo mismo.
A unos metros del ciudadano José Araújo está sentado el regidor, Jesús Vázquez, con la candidata popular al Congreso, Ana Belén Vázquez, y otros componentes de la candidatura como Celso Delgado. "Esta vez la situación es distinta por encabezar la lista, pero el mérito es del gran equipo que hay detrás".
El candidato de En Marea, Iván Olmos, es nuevo en estas lides y compite con En Común Unidas Podemos por el mismo espacio. Ledicia Piñeiro se encuentra a unos metros de Olmos, pero la disputa es electoral. El BNG, que encabeza Iago Tabarés, y el PSOE, que lidera Marina Ortega, han pasado la mañana recorriendo otra feria, la del Barbaña, y no se les ve en el recinto ferial.
Sobre las tres ya no quedan políticos en el recinto. Han comido, pero han desaprovechado el menú de campaña para dar la mano en cada mesa. Sigue la feria.
