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El Campus cierra 10 días con la meta del ahorro energético

Ambiente en el Campus de Ourense, ayer por la tarde// Martiño Pinal
photo_camera Ambiente en el Campus de Ourense, ayer por la tarde// Martiño Pinal
La actividad lectiva se suspende en Semana Santa y en el marco de "evitar a emisión de CO2"

El Campus de Ourense se despide hasta el próximo 5 de abril. Las dependencias universitarias cierran por Semana Santa, pero con el plus añadido de una estrategia de ahorro energético. El pasado año también se suspendió la actividad académica en estas fechas festivas, pero a causa del confinamiento por la pandemia del covid. 

Una instrución de la gerencia de la UVigo hace referencia a que "todas dependencias e instalacións da Universidade de Vigo permanecerán pechados entre os días 29 ao 31 de marzo, ambos incluídos". 

Además de suspender la actividad lectiva, también cerrarán los  servizos, áreas y unidades de gestión. "Con todo, establecéronse un servizos mínimos para atender actividades esenciais, por exemplo no Cacti, no Cinbio-Animalario ou na Área de Tecnoloxías da Información e Comunicación. Estres días serán inhábiles para os efectos de cómputo de prazos nos procedementos administrativos", especifican desde la UVigo.

El Campus de Ourense, junto al de Vigo, volverá a la normalidad el citado 5 de abril. El de Pontevedra el día 6, ya que el 5 es festivo local. 

"Estas mesmas medidas de suspensión da actividade e peche das instalación repetirase no mes de agosto, en concreto entre o 4 e o 18 de agosto, do mesmo xeito que se fixo nos dous cursos pasados. A finalidade destas medidas é reducir o custe enerxético dos campus en períodos nos que a actividade adoita ser moi reducida", adelantan desde la institución académica.

En 2019, esta estrategia de ahorro energético ya desarrolló una primera experiencia piloto, en agosto. "O peche deses trece días supuxo para institución un aforro económico de 15.000 euros, pero tamén un aforro en pegada ecolóxica, xa que se evitou a emisión de 58 toneladas de CO2 á atmosfera, o equivalente a 122 vivendas unifamiliares durante un ano", apunta el rector, Manuel Reigosa. Valora el balance "positivo" de la experiencia, ya que desde la Rectoría apostaron por continuar con estas medidas en los veranos siguientes y ampliarlas, como ahora, a Semana Santa

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