La junta de gobierno aprobó su nombramiento en la misma reunión que cerró el caso del Día da Bici

Carballido recibe el visto bueno como director xeral

Xosé Carballido Presas
El derrumbe del edificio de dos pisos en la calle Villa Valencia, con el trágico resultado de un fallecido, obligó a aplazar la junta de gobierno local hasta pasada la una y media de la tarde, pero no evitó un nuevo debate interno, en el seno del gobierno municipal, a propósito del Día da Bici y la prohibición de acceder al Posío para que los participantes ganadores recogiesen sus premios.
Las declaraciones efectuadas por el nacionalista Fernando Varela, concejal de Deportes, responsabilizando de lo sucedido a la Concejalía de Comercio, molestaron a su titular, el socialista José Angel Vázquez Barquero, que, según fuentes consultadas, reprochó las acusaciones del anterior, aunque Varela -que ayer precisaba en un comunicado que si este año no dio subvención a los organizadores de la jornada, el Club Ciclista Ourensano, fue porque no la solicitó, al margen de que deba 348 euros por no justificar debidamente facturas anteriores- se habría ratificado en responsabilizar a Comercio del conflicto, exonerando al ala nacionalista del error cometido.

Con todo, las diferencias no afectarán en absoluto al pacto de gobierno, que ayer dio el visto bueno sin reparos al nombramiento de Xosé Carballido Presas (BNG), hasta ahora director xeral de Termalismo (área que se ha integrado en la responsabilidad de Barquero), como nuevo responsable de Rehabilitación Urbana, también con categoría de dirección xeral. La permanencia de este cargo de confianza para el BNG quedó acordada en el pacto de gobierno con los socialistas.

La misma junta municipal de gobierno dio cuenta de la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Ourense, que avala el acuerdo que declaró ilegalizables cuatro vallas publicitarias ubicadas en la calle Marcelo Macías y que habían sido instaladas sin la preceptiva licencia municipal. Estaban ubicadas a la altura del número 149 y la empresa promotora había pedido permiso en el trámite de legalización pero le fue denegado porque se incumplía la normativa urbanística de aplicación. Esta es la segunda sentencia favorable al Concello en expedientes de disciplina urbanística relacionados con la instalación de vallas publicitarias. Ya en verano, el Juzgado había confirmado la resolución municipal de denegar la legalización de otras tres vallas instaladas sin permiso en la misma calle, pero a la altura de los números 115 y 117.

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