Tras finalizar las obras de mejora en 1,5 kilómetros de la OU-105 a su paso por Seixalbo, la Xunta avanza en la segunda fase del proyecto de la misma vía. Ethel Vázquez, conselleira de Infraestruturas, anunció este miércoles, durante la inauguración oficial del tramo, una inversión de 500.000 euros destinados al nuevo acceso al tanatorio de As Burgas, una demanda histórica de los vecinos. "Estamos ultimando o proxecto e sacaremos á información pública o proxecto o próximo 19 de agosto, e queremos tratar tamén cos veciños as obras para recoller as achegas dos veciños", explicó Vázquez.
El acceso al tanatorio supone hoy en día un riesgo para los peatones, que no disponen de un paso de cebra cercano. "Queremos mellorar a accesibilidade, a mobilidade e a seguridade viaria", señaló la conselleira. También se reformará el acceso para los vehículos a la zona, que disponen actualmente de un carril de incorporación.
Un pueblo “más seguro"
La conselleira de Infraestructuras visitó ayer Seixalbo para presentar el proyecto ante el colectivo vecinal de la localidad. "Estas obras non só mellorarán a mobilidade e accesibilidade de Ourense, e tamén contribuirán a poñer en valor a vila, un dos núcleos históricos da cidade", explicó. En el acto también estuvo presente el alcalde en funciones, Jorge Pumar, quien destacó la "colaboración" de la administración autonómica. "Los vecinos de Seixalbo tienen hoy un pueblo más seguro y el resto de ourensanos también se verá beneficiado de las mejoras, puesto que esta es una de las entradas de la ciudad y un punto de mucho tráfico", apuntó Pumar. "Queremos agradecer que el trámite administrativo para la segunda fase ya está casi a punto de resolverse, que es una parte muy importante para humanizar esa zona", añadió.
Voluntad política para cubrir las demandas del colectivo vecinal
Ethel Vázquez y Jorge Pumar aseguraron que, tanto por parte de la Xunta como del gobierno local, hay intención de acometer las mejoras demandadas por el colectivo vecinal. "Esta é só a primeira fase do que queremos facer", afirmó Vázquez. "Estaremos de la mano, tanto la consellería como el Ayuntamiento, de dar respuesta a las peticiones", añadió Pumar. Varios representantes vecinales, también presentes durante la inauguración del tramo, recordaron demandas todavía no ejecutadas, como reformar las aceras de todo el tramo –todavía quedan partes en mal estado– y la colocación de árboles para "humanizar" la zona.
Xosé Carballido, presidente de la asociación San Breixo, reivindicó la posibilidad de acometer las mejoras en las próximas obras."Hai que ter en conta que o terreo para facer todas as beirarrúas foi cedido gratuitamente polos veciños de Seixalbo, non se expropiou, polo que nos gustaría o detalle de melloralas", explicó. "Agora que isto xa deixa de ser unha gran carreteira para ir ao polígono, ao eliminar o dobre carril de subida, gustaríanos recordar os árbores", añadió Carballido, quien agradeció las nuevas medidas para mejorar la seguridad vial, así como para beneficiar las conexiones entre un margen y el otro del pueblo. Las obras, en su día criticadas por gran parte del colectivo vecinal, todavía no convencen a muchos: "Os conductores non entenden a señalización da entrada da vila".n
