Efectivos de la Guardia Civil y de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Castro Caldelas protagonizaron en la jornada de ayer una emocionante ruta por los pueblos del rural, con el objetivo de agradecer a los niños su comportamiento durante el estado de alarma.
El Concello presidido por Sara Inés Vega quiso premiar su paciencia y responsabilidad con un pequeño "agasallo", dedicándoles no solo una visita personalizada, sino que esta iba acompañada de un pequeño regalo, un diploma acreditativo y una bolsa de golosinas.
La comitiva, que llevaba banda sonora infantil para la ocasión, partió a las diez de la mañana de la capitalidad con destino a los hogares de los 80 menores registrados en el término municipal. "A experiencia está sendo de unha gran emoción por parte dos nenos e nenas, das familias e de todos nós!", confesaba la alcaldesa Sara Inés Vega, quien subrayó la importancia de conocer de primera mano sus sentimientos, deseos e inquietudes. "Está sendo moi emocionante recibir o seu cariño, a súa ilusión, os seus debuxos, o que sinten!", destacaba.
Mascarillas y diplomas
Este no ha sido el único reconocimiento que, a lo largo del confinamiento, ha tenido la población menuda de la provincia. Los niños de Laza recibieron varios regalos "por buen comportamiento". El teniente de alcalde, Jorge Lorenzo, también les hizo llegar un diploma y Loli Pérez, una empresaria local, les cedió mascarillas. Los menores de Trives, Manzaneda, San Xoán de Río, Vilarino, Viana do Bolo, Sandiás o Bande también tuvieron su particular homenaje. En este último municipio, el Concello aprovechó la festividad del Día del Libro para regalarles un libro, golosinas, una mascarilla y un diploma.
