Ocho de los 11 MIR que terminaron este año la formación de Primaria seguirán en la provincia
Esta semana se despedía una nueva promoción de médicos residentes en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). Cuarenta médicos internos residentes (MIR)que finalizaron sus años de formación y ahora se lanzan a la vida profesional. "Tener a MIR es una buena noticia para el hospital, la docencia es un revulsivo y obliga a hacer las cosas de forma diferente", destaca el gerente del área sanitaria, Julio García Comesaña. La próxima semana llega una nueva hornada. En el medio, como siempre, un reto que desde hace años sigue sobre la mesa, retener a estos residentes que se forman en la provincia y que, en algunos casos, se ven abocados a irse a otras comunidades, con contratos más atractivos.
La situación parece haber variado. En el área de Atención Primaria, una de las más delicadas por la sobrecarga asistencial denunciada por los profesionales durante los últimos meses, las noticias son positivas. De los 11 que se han formado, 8 seguirán. "Es para estar contentos y es un mérito de los tutores", resalta García Comesaña.
Una MIR, para Viana
"Había una vacante en Viana que nadie quería y la ocupará un MIR", señala García Comesaña, que valora positivamente los resultados. Otros han cogido otras plazas en centros de salud de la ciudad y otros se han acogido al nuevo contrato de continuidad –un año, con limitación geográficay un mes de vacaciones, y prorrogable a tres años–.También se han retenido bastantes residentes de atención hospitalaria –entre 15 y 20–, de diferentes especialidades,. Otros optaron por marcharse, al encontrar ofertas más atractivas o por motivaciones personales.
La tendencia ha mejorado, pero José Luis Jiménez, presidente del Colegio de Médicos, sigue defendiendo que "hay que mejorar las condiciones. Debería hacerse un esfuerzo para que se quedasen todos". En ese sentido, bromea con lo que le dirán a la próxima hornada formativa: "Que de aquí ya no van a poder salir". Aplaude el contrato de continuidad implantado por el Sergas a petición de los colegios y los sindicatos, pero augura problemas. "Siempre dije que había que hacer la mejora hace cuatro años. Ahora de Primaria se van a jubilar cinco, el problema está ahí. Dos o tres médicos de familia se podrían haber quedado con más valentía estos años. Esto no llegará para paliar el problema, hay que hacer más atractivo el trabajo complementario por las tardes", añade Jiménez.
La apuesta de Jiménez es "limitar más" los desplazamientos, ubicando a los residentes en los centros de salud grandes "con salidas puntuales", para hacer más atractivo su inicio profesional, y "buscar un itinerario profesional" a los que se van a destinos menos apetecibles, como los de la alta montaña oriental ourensana.
Jiménez destaca que se quede "un gran grupo de médicos de familia" y reconoce que ha habido "esfuerzo" en mejorar las condiciones, especialmente con la libranza de guardias o con la delimitación del área de trabajo, pero "se tiene que acotar más".
Seguir mejorando
García Comesaña cree que debe hacerse, aunque confía en que "cuantos más contratos de continuidad se vayan firmando, mejor se podrá ir haciendo". De momento, se han sellado siete, y va en aumento. El primer contrato que se firmó incluye en el área de trabajo el centro de salud de Valle Inclán, Nogueira de Ramuín, Pereiro de Aguiar y A Limia.
Desde el sindicato CESM, Emilio Armada cree que hubo "un gran avance" y que las condiciones son mucho más atractivas, "aunque no sea lo mismo que una plaza fija". Además destaca que empiezan a funcionar las listas de contratación en especialidades hospitalarias y que se saldrán 80 plazas en Primaria. "No es todo lo que haría falta, pero tras los últimos años que vivimos, se percibe como una tímida mejora. Algo es algo", indica. Lo que tiene claro es que "hay que retener más" a los residentes, porque la sobrecarga se mantiene "y cada vez somos más mayores".
El 56% de los que se formaron hace su labor en Ourense
En el 21º Congreso Nacional de Hospitales, celebrado en Santiago, un equipo del área sanitaria presentó un estudio sobre la retención de MIR de familia desde 2005, que demuestra un elevado nivel de fidelización. Tras analizar 139 registros, concluyeron que el 82,7% están trabajando para el Servizo Galego de Saúde, y solo un 17,27% están fuera.El 56,83% de los MIR desempeña ahora su labor en la provincia de Ourense, donde hicieron la especialidad, el 7,19% en Lugo, y el resto en otras áreas gallegas. "Los datos son buenos y rompen ese mito de que todos se marchan", apunta García Comesaña.
Por último, la gerencia acaba de firmar los dos primeros contratos de profesionales que trabajaban en Portugal, para reforzar la Atención Primaria. En este caso, son españoles que han optado por volver por el nuevo contrato.
