El tiempo

Vuelve la lluvia tras un fin de semana en alerta naranja por el calor

Se espera que las máximas no superen los 30 grados

Aunque el mes de septiembre comenzó como se desarrolló agosto, con los termómetros marcando temperaturas muy altas, "elevadas para este período do ano" según reflejan desde Meteogalicia, el mercurio irá descendiendo paulatinamente desde la jornada de hoy, con la previsión de que a finales de esta semana las máximas se sitúen en el entorno de los 26 o 27 grados.

Además, los ourensanos deberán prepararse para sacar el paraguas del armario, ya que la predicción apunta a que, al menos hasta el jueves, caerán precipitaciones, eso sí, de carácter ocasional y tormentoso.

Todo esto llegará después de un tórrido fin de semana en la provincia, en especial en los concellos situados en la cuenca del Miño, en los que la Xunta se vio obligada a activar la alerta naranja por el ascenso de las temperaturas hasta rozar los 39 grados en la ciudad, aunque en localidades como Arnoia se superaron los 40 grados, quedándose a pocas décimas Leiro, con 39,7.

Las orillas del Miño, las piscinas o la recientemente estrenada zona acuática del parque infantil de la Alameda do Cruceiro se convirtieron en el refugio de decenas de personas para hacer frente al calor del fin de semana.


Calor en septiembre 


Si el mes de agosto vivido en la ciudad se convirtió en el sexto más caluroso del presente siglo, en lo que respecta a septiembre, para encontrar el techo de la temperatura media hay que viajar 12 años atrás, cuando el noveno mes del año registró 21,5 grados.

Solo en otra ocasión, en 2009, la ciudad de Ourense cerró septiembre con una temperatura media superior a los 21 grados, aunque sí es habitual que la cifra esté por encima de los 20.

Por otro lado, pese al calor registrado durante el pasado fin de semana, el mercurio no subió tanto en la ciudad de As Burgas como sí lo hizo en septiembre de 2016, cuando se llegó a anotar una temperatura de 41,5 grados, según los datos proporcionados por Meteogalicia.


Tendencia


Desde hace cuatro años, durante los meses de septiembre se han ido reduciendo las precipitaciones registradas en la ciudad, hasta los 6,8 litros por metro cuadrado que recogió la estación meteorológica el año pasado.

El récord de lluvias caídas en el noveno mes del año durante la presente década lo tiene el ejercicio de 2014, cuando los litros por metro cuadrado recogidos se situaron en 81. 

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