La CIG sostiene que varios trabajadores del centro de menores de Ourense en Montealegre sufrieron agresiones por parte de los residentes y que esta circunstancia les mantiene en situación de incapacidad temporal.
En un comunicado emitido este viernes, la central nacionalista ha acusado a la empresa Fundación Diagrama, concesionaria del servicio, de "no adoptar las medidas oportunas" para evitar estas situaciones, que asocia a la falta de personal.
De este modo, ha demandado a la Xunta que adopte medidas urgentes para reclamar soluciones a una compañía "a la que abona cientos de miles de euros" para gestionar este centro, cuyo contrato fue renovado antes del pasado verano.
"La Consellería de Política Social tiene que velar por el correcto funcionamiento del centro y exigir que se ponga remedio a estos episodios de agresiones, para lo que es imprescindible dotar al centro del personal necesario", ha añadido la CIG.
Asimismo, también ha reclamado que se revise la calificación de este centro de menores "para adaptarlo a la realidad, tal como se le trasladó por parte del Comité de Empresa a los reponsables de la consellería en una entrevista que mantuvo hace un par de meses".
No obstante, desde el gobierno autonómico subrayan que "a Xunta non ten constancia dun aumento de agresións neste centro, máis aló dos problemas puntuais que poden suceder neste tipo de centros específicos para rapaces con trastornos de conduta".
"Precisamente por iso, o centro de Montealegre conta cunhas ratios de persoal reforzadas respecto aos centros ordinarios de protección. É dicir, conta con máis persoal que un centro ordinario, incluíndo persoal especializado", precisan, refiriéndose a la dotación de psicólogos, por ejemplo.
"A Xunta é sempre receptiva a reunirse cos representantes dos traballadores, pero sorpréndennos que na ultima reunión, celebrada hai unhas semanas, non nos comentaron esta cuestión", matizan desde el gobierno autonómico.