La falta de caudal del río Loña, y por tanto de los embalses de Cachamuíña y Castadón, que abastecen a la ciudad, obliga al cambio de captación de agua de la red municipal al río Miño. Según fuentes de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, este es un procedimiento “habitual” durante los meses estivales, cuando el nivel desciende, para mantener el caudal ecológico -el mínimo nivel que permite mantener vivo el ecosistema fluvial-.
Esta situación, sin embargo, no afecta al concello de Pereiro, ya que la captación para su red municipal de abastecimiento no procede de Cachamuíña.