Los alumnos de Infantil y Primaria del colegio Maristas de la ciudad participarán la próxima semana en una experiencia novedosa: el Entroido y oficios típicos se unirán para renovar las asignaturas tradicionales.
Sólo la imaginación y la pasión por un trabajo pueden evitar que la rutina mecanice las horas laborales. Y en los tiempos que corren cada vez es más difícil encontrar profesionales que busquen enfoques nuevos y atractivos distintos para atraer a su "público".
Pero los hay, como en el colegio Maristas de Ourense, donde la próxima semana se unirán Entroido y oficios tradicionales de Galicia con las asignaturas clásicas de todos los años: matemáticas, coñecemento do medio, plástica o música.
"Llevamos un mes preparando este proyecto que lanzamos la semana que viene. Buscamos una línea de innovación para trabajar con los más pequeños, desde los tres años, hasta sexto de Primaria. Queremos trabajar con todo el Entroido tradicional y con los oficios típicos relacionados con Galicia. Se trata de que lo conozcan todos y a la vez vayan trabajando con otros temas, como la geografía, situando los distintos Entroidos; con el análisis de las músicas y las canciones de las zonas, elaborando máscaras. O sea incluir dentro de este tema todas las asignaturas", explica el jefe de estudios de infantil y Primaria del colegio Maristas, Fabio Tabarés
Primaria e Infantil
Así que los 225 alumnos de Infantil y los aproximadamente 450 de Primaria vivirán la próxima semana una experiencia especial: sin clases normales, pero aprendiendo más y de manera mucho más divertida y didáctica, pasando de taller en taller.
"Además de realizar las actividades que hemos elaborado para este proyecto educativo, los alumnos también participarán en actividades organizadas por el Concello como las comadres y compadres", explica Fabio Tabarés.
Muestra su entusiasmo afirmando que "ésta es una nueva forma de trabajar, que tampoco la hemos inventado nosotros, pero es una tendencia en la educación, la de trabajar de manera interdisciplinar, pero no sólo es bueno para los alumnos, sino también para los profesores que se ven obligados a trabajar en común para un solo proyecto, trabajo en equipo. El resultado al final es mucho más enriquecedor para todos".
Los padres fueron adecuadamente informados a través de una primera circular y todos se mostraron de acuerdo con esta iniciativa. "Tuvo una excelente acogida, pero es que no hay que olvidar que todo lo que se haga es evaluable, sus trabajos servirán para las notas. Sólo que hemos buscado una manera diferente de motivar a los alumnos".
Y así, cada ciclo tendrá un encargo especial. Desde la elaboración de máscaras, al entierro de la sardina, pasando por la confección de un stand turístico para promocionar estas fiestas que será instalado en el hall del colegio.
Un proyecto completo que abarca todo el ciclo carnavalero, aderezado con los oficios tradiciones y con conocimientos históricos, geográficos, musicales, plásticos y hasta matemáticos.
Fabio Tabarés resalta, no obstante, que "ya llevamos varios años con esta experiencia, desde hace dos o tres estamos intentando incluir este tipo de actividad en el proyecto curricular en la clase. Han ido viniendo algunos años figuras representativas del Entroido de la provincia. Hemos ido poco a poco y este año por fin hemos logrado implicar a todas las áreas en un proyecto común".
Pero este intenso trabajo educativo que a la vez destaca valores como el trabajo en equipo, la unión, la búsqueda de otras miradas y deja claro que el aburrimiento no tiene que ser sinónimo de estudiar e ir a clases, tendrá al final , una recompensa especial.
El 28 de febrero por la tarde, el Pabellón del colegio acogerá un gran Festival de Carnaval. Será el broche de oro a una semana de experiencias nuevas y de importantes esfuerzos.
Fiesta en el Pabellón
Los niños acudirán como auténticos artesanos. En el pabellón se citarán panaderos, zapateros, plañideras, y todo un amplio elenco de oficios. Fabio Tabares espera que esta sea la primera experiencia de otras muchas que le puedan seguir.
Un proyecto interdisciplinar que, según el jefe de estudios de Maristas, "aunque resulte más trabajoso y requiera un mayor esfuerzo a todos los profesores, también es al final, mucho más enriquecedor, por lo que merece la pena las horas invertidas en él".
Así que la próxima semana, el Colegio Maristas abandonará la rutina cotidiana de las clases, y el Entroido entrará libremente para asentarse en pupitres y aulas, y con la ayuda de los profesores, enseñar a los niños, a través de la novedad y la diversión, asignaturas con historia y tradición.
